Una tarea que había hecho en el siglo XIX Francisco José de Caldas podría ser ajustada ahora, tras más de dos siglos. En 1802, el científico propuso la clasificación de los pisos térmicos, alrededor de los cuales los cambios solo han sido de nombre.

Ahora, por un proyecto de ley de energía, el senador Gustavo Moreno, quien preside la Comisión Sexta, donde se debaten y aprueban los temas energéticos, radicó una iniciativa que se basa en la sensación térmica.

Según la exposición de motivos, la idea es crear un nuevo piso térmico con el fin de “garantizar la equidad en el consumo de subsistencia” (la cantidad mínima de energía mensual que se requiere para cubrir las necesidades energéticas en un hogar).

El autor de la propuesta legislativa enfatiza en que su iniciativa no busca regular las tarifas de la energía, puesto que no es al Congreso de la República al que le corresponde esa actividad. “Buscaremos, a través del proyecto de ley, la creación de nuevos pisos térmicos y aumentar el consumo de subsistencia en nuestro país”, sostuvo Moreno.

De esa manera, el proyecto de ley es breve: en solo cinco artículos plantea causar un fuerte remezón al proponer que el factor térmico sea un componente técnico “determinante y de obligatoria consulta en materia regulatoria”.

Calor por encima de los 30 grados. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Dos de los artículos que contiene el proyecto de ley constituyen la médula. Uno aclara lo que se entenderá como consumo de subsistencia, de tal forma que se tenga en cuenta el concepto para efecto de la ley que se está proponiendo.

Así las cosas, “el consumo de subsistencia del servicio de energía eléctrica es la cantidad mínima de electricidad, utilizada para un mes, por un usuario típico, para satisfacer las necesidades básicas, lo que se hace con energía final”.

Pegado a esa definición, el proyecto de ley establece que en los seis meses siguientes a la aprobación de la ley, la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme), o la entidad que haga sus veces, fijará pisos térmicos para efectos del consumo de subsistencia de energía eléctrica.

Más de 500 metros sobre el nivel del mar

Los rangos de pisos térmicos que incluye la iniciativa incluirían altitudes de 500 metros sobre el nivel del mar, entre 500 y 1.000 metros, e iguales o superiores a 1.000 metros.

De acuerdo con la sustentación de Moreno, “ha sido injusto que ciudades sobre el nivel del mar, como las de la Costa Caribe, o como Barrancabermeja, Honda, Soledad y Neiva, que tienen temperaturas altas, se encuentren en el mismo piso térmico que ciudades de 900 a 1.000 metros sobre nivel del mar”.

Si se traslada esa argumentación del parlamentario a la realidad tarifaria de Colombia, muchos colombianos estarían pagando de manera excesiva por un mayor consumo de energía, debido a que habitan por debajo de los 500 metros sobre el nivel del mar, en zonas altamente calurosas que conducen a tener que sobreutilizar el aire acondicionado y el ventilador.

El calor superior a 30 ºC requiere un mayor uso del aire acondicionado. | Foto: Getty Images

De acuerdo con lo establecido en la propuesta, la cantidad de energía en kilovatios por hora-mes sería definida a través de una resolución de las autoridades competentes. En todo caso, el consumo de subsistencia basado en la valoración de la sensación será para la población de aquellos municipios que se encuentran en climas cálidos, con sensaciones térmicas superiores a los 30 °C.

Las tarifas de energía han sido un golpe duro para la economía del hogar. Desde que llegó el fenómeno de El Niño, en 2023, el sector eléctrico del país se encontró de pronto en alerta, porque la sequía iba aumentando el precio del servicio, lo que se vio reflejado en la presión que hizo ese gasto en la inflación total.

Para las familias, el precio subió en 43 % en los últimos tres años, pero las regiones más calurosas han tenido incrementos más visibles y un tratamiento desigual con otras regiones.

El proyecto de ley de Moreno podría dar pasos de gigante en los estrados del Legislativo.