‘La sociedad de la nieve’, una producción cinematográfica de Netflix, que es candidata al Óscar, no solo ha despertado el interés de los espectadores al revivir uno de los episodios de supervivencia más grandes del siglo XX, sino también del mundo empresarial, el cual la toma como una lección importante para descubrir la importancia del trabajo en equipo y el liderazgo como una herramienta clave para superar grandes dificultades.
Para Maite Moreno, directora del Máster en Recursos Humanos de EAE Business School Barcelona, es importante destacar que “Al igual que en las empresas, donde la colaboración y la cultura de equipo son esenciales, en la tragedia de los Andes, la unión y el trabajo en equipo fueron cruciales para la supervivencia. La cooperación entre los sobrevivientes, su solidaridad y apoyo mutuo, reflejan la importancia de la cultura corporativa en la promoción de la colaboración y el trabajo en equipo en situaciones adversas”.
Lo que las empresas necesitan
Los supervivientes del siniestro aéreo conformaban un equipo de alto rendimiento, al ser, muchos de ellos, jugadores de un equipo de rugby, quienes estaban entrenados y tenían una sinergia natural, en las que unos se apoyaban en otros y así lograban llevar a cabo misiones. Esto en las empresas es uno de los determinantes para enfrentar con éxitos lo imprevistos que se pueden atravesar.
“Los equipos de alto rendimiento se conocen muy bien y tienen valores comunes. También hay confianza y respeto”, detalla Esther González Arnedo, quien dirige el Máster en Dirección de Recursos Humanos y Desarrollo de Talento EAE Business School Madrid. “Tal como ocurre en La sociedad de la nieve, el contar con los equipos humanos adecuados, formados por personas motivadas, compenetradas y dispuestas a solucionar los problemas, va a marcar la diferencia entre la supervivencia y la muerte empresarial”.
Es importante recalcar que para que exista un equipo unido debe haber un liderazgo adecuado. En el caso de La sociedad de la nieve, tomar la iniciativa y motivar a los demás atravesar la línea de la meta con éxito o fracaso, y esto se evidenció en roles que se veían directamente en la película. Es esa la figura que debe emerger naturalmente y reflejar la cultura y valores de la organización, tal como la del grupo de sobrevivientes.
“Un buen líder crea y mantiene equipos de alto rendimiento, mantiene una alta motivación y compromiso de todos sus colaboradores”, declara Esther González. “No hay que olvidar que el buen líder no piensa en que su equipo está para servirle, sino justo lo contrario: está para cuidar y hacer crecer a todos los suyos”.
El co-liderazgo y liderazgo en empresas
En el mundo empresarial, el liderazgo no siempre recae en una sola figura. En momentos cruciales, surge el concepto de liderazgo situacional, según lo explica Esther González Arnedo, experta en recursos humanos. Este enfoque reconoce que cualquiera puede ser un líder si la situación lo requiere y se dan las condiciones adecuadas.
El co-liderazgo se vuelve esencial en situaciones complejas donde el líder principal puede verse superado. Un ejemplo de esto se encuentra en la tragedia de los Andes, donde distintos individuos asumieron roles de liderazgo para enfrentar diferentes aspectos de la crisis.
Para Maite Moreno, directora del Máster en Recursos Humanos de EAE Business School Barcelona, la adaptabilidad y la resiliencia son fundamentales tanto en situaciones límite como en el mundo empresarial. Aprender de experiencias pasadas y aplicar lecciones para mejorar la cultura corporativa y la toma de decisiones son prácticas vitales para el crecimiento y la resiliencia de una organización.
La vida empresarial es impredecible, y la capacidad de reacción ante tropiezos puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. La historia de supervivencia en La Sociedad de la Nieve ofrece valiosas lecciones en liderazgo y organización empresarial, demostrando el potencial de los equipos humanos para enfrentar cualquier desafío.
En resumen, el liderazgo y el co-liderazgo emergen como pilares esenciales en la gestión empresarial, destacando la importancia de la adaptabilidad, la resiliencia y la capacidad de reacción ante situaciones cambiantes.