El fabricante automotriz francés Renault reducirá su participación en su socio japonés Nissan a 15 % del capital contra 43,4 % en la actualidad, en una decisión que apunta a equilibrar las fuerzas en la alianza tras meses de duras negociaciones.
“La ambición es reforzar los lazos de la alianza y maximizar la creación de valor para el conjunto de las partes concernidas”, incluyendo nuevos proyecto en América Latina, según un comunicado común.
Se trata de una gran reorganización de las condiciones de asociación entre los dos grupos, que desde el inicio de su alianza en 1999 han vivido periodos muy buenos, pero también graves crisis de confianza, especialmente tras la espectacular caída de su expresidente Carlos Ghosn en 2018.
Renault y Nissan van a tener cada uno 15 % del capital del otro grupo, “con una obligación de conservarlo, así como una obligación de poner techo a sus participaciones”, de acuerdo con el texto conjunto.
De todas maneras, el grupo francés no va a vender de inmediato el resto de sus acciones en Nissan (28,4%) porque su valor de mercado es muy inferior al valor actualmente registrado en sus cuentas.
Además, para evitar depreciaciones masivas, Renault va a transferir este paquete a un fondo fiduciario con sede en Francia, donde los derechos de voto correspondientes a esas acciones quedarán “neutralizados” para la mayoría de las decisiones, precisó el fabricante francés en el comunicado.
En cambio, Renault continuará recibiendo dividendos sobre esas acciones hasta su venta, para la cual no se estableció ningún plazo específico.
Nissan, por su parte, ya tenía 15% de las acciones de Renault, pero estaba privado de los derechos de voto, una restricción que será levantada.
No se trata de una “victoria de Nissan sobre Renault”, había asegurado una fuente francesa cercana a la cuestión interrogada por AFP hace unos meses.
Porque si la “frustración” de Nissan por su relación con Renault era muy visible, el grupo francés también estaba insatisfecho de la situación y quería “normalizarla” para que la cooperación se volviese más eficaz y rápida, según este mismo fuente.
Por otro lado, Nissan invertirá en Ampere, la futura división eléctrica de Renault, para convertirse en un “accionista estratégico”, indicó el comunicado del grupo japonés.
También están previstos nuevos proyectos operativos entre Renault y Nissan en América Latina, India y Europa, según el comunicado. Los acuerdos sobre estas diferentes cuestiones “están siendo finalizados” y aún deber ser aprobados por los consejos de administración de cada uno de los fabricantes.
Renault y Nissan realizarán anuncios más detallados el 6 de febrero, había indicado la semana pasada a la AFP una fuente cercana a las negociaciones.
Las ventas de la marca Renault cayeron un 14,6 % en 2022
Las ventas de la marca Renault cayeron un 14,6% en 2022, a causa de los problemas de suministro de chips electrónicos, la salida del mercado ruso y una reorientación hacia modelos más rentables.
La marca vendió 1.466.729 vehículos en 2022, indicó este martes el fabricante, frente a los 1.751.000 del año 2021. Sin contar a Rusia, la caída fue del 9,4%.
Las ventas del grupo retrocedieron en particular en Europa, donde el grupo dio prioridad a “los segmentos que generan más valor”, es decir, los vehículos eléctricos e híbridos, las ventas a particulares, los utilitarios y los compactos.
Las mayores caídas se dieron en los pequeños modelos como los Clio, en particular en sus versiones mejor equipadas. Las ventas de Renault cayeron más que la media del mercado, pero la firma francesa sigue en el podio de ventas de vehículos eléctricos en Europa, por detrás del grupo norteamericano Tesla y el alemán Volkswagen.
En mayo de 2022, a causa de las sanciones vinculadas a la guerra de Ucrania, el fabricante francés vendió sus activos en Rusia, hasta entonces uno de sus principales mercados