Faltan menos de tres días para que Gustavo Petro asuma como el presidente de los colombianos durante los próximos cuatro años y desde que ganó en las pasadas elecciones de segunda vuelta (el pasado 19 de junio), muchas son las preguntas que se hacen los diferentes sectores en el país, respecto a lo que vendrá en el corto, mediano y largo plazo para la economía nacional.
Para nadie es un secreto que el líder de izquierda, primero de esta corriente política que llega a la Casa de Nariño, ha prometido cambios fundamentales al modelo productivo, para impulsar el uso de las energías limpias y restar rango de acción, por ejemplo, a las industrias extractivas, con el fin de explotar el potencial medioambiental que tiene Colombia.
Ya sea en el tema de impuestos, con una reforma tributaria que busca recaudar 50 billones de pesos, en el manejo de la paz o lucha contra las bandas criminales, así como el cambio de las relaciones con el Congreso y la organización de instituciones como la Policía Nacional, el gobierno de Petro parece que generará muchas controversias.
Ahora bien, uno de los temas más álgidos está relacionado con Ecopetrol, una empresa que no ha tenido un día de descanso en los mercados local e internacionales, tras los comicios presidenciales, pero que pese a esto se mantiene a flote y sigue siendo la más rentable del Gobierno nacional, o como se dice popularmente “la gallina de los huevos de oro”.
La negativa de Gustavo Petro a mantener el fracking y su intención de apostarle a otros modelos económicos durante su mandato, sumado a la volatilidad que traen los precios del petróleo desde hace varios meses, han sido algunos de los factores que han jugado en contra de esta compañía, frente a la que por ahora muchos prefieren esperar a ver qué tanto le mete mano el nuevo presidente de la República.
En medio de todo esto, una de las preguntas que muchos se hacen es si Felipe Bayón, actual presidente de Ecopetrol, seguirá en su cargo o si el ministro de Hacienda designado, José Antonio Ocampo, hará valer su puesto como vocero del accionista mayoritario de la empresa y pedirá su cambio ante la junta directiva, situación que parece no inquietar a la cabeza de la petrolera.
En diálogo con los medios de comunicación, Bayón aseguró que todo cambio que se quiera hacer en cuanto al mandato de esta firma debe ser llevado primero ante la Junta Directiva y cumplir todo un protocolo, que existe precisamente para evitar que se afecte la estabilidad de la misma.
“La decisión del nombramiento o remoción de un presidente de Ecopetrol es potestad de la junta directiva y en ese sentido y hemos escuchado con atención y hemos entendido las declaraciones del ministro Ocampo, que vienen ajustes en términos de la junta directiva y digamos que habrá que esperar a que se cumpla ese proceso”, dijo al respecto.
Si bien este funcionario reconoce que el Estado es el accionista mayoritario, también dejó claro que todo tiene un proceso y que este tipo de decisiones son discrecionales de la junta directiva, la cual puede convocarse de manera extraordinaria o esperar a su junta anual que se realiza habitualmente en el mes de marzo.
“Hace algunas semanas que conversábamos con ustedes les decía yo que el gobierno entrante, particularmente el Ministerio de Hacienda y Crédito Público como representante del accionista mayoritario, con el 88 y medio por ciento de la propiedad en Ecopetrol, tiene total libertad para hacer los cambios que estime convenientes desde el punto de vista de estatutos o del punto de vista de nominaciones, en términos de la conformación de las planchas para la junta directiva y ahí ellos decidirán si efectivamente se hará una asamblea extraordinaria o si se opta por una ordinaria, como se hace normalmente en marzo”, explicó Bayón.
El presidente de Ecopetrol agregó que “entonces yo creo que esto es lo más importante y lo otro es decir que hoy Ecopetrol, y lo estamos demostrando con estos resultados, es una compañía fortalecida, es una compañía que lidera en la transición energética, es una compañía que opera de cara a los territorios y es una compañía que digamos que de alguna manera tiene una visión clara de cara al 2040″.
No obstante, reconoció que hay muchos cambios que se pueden hacer en la búsqueda de un desarrollo sostenible, acabando con políticas “desalineadas” con la filosofía de transición energética que esta empresa viene implementando desde hace varios años, con apuestas, por ejemplo, a productos como el hidrógeno verde y el uso de energía solar.
“Hemos tenido, durante las reuniones de empalme, unas conversaciones supremamente enriquecedoras y un poco mi percepción, la percepción de Felipe, es que hay muchos elementos de lo que está haciendo Ecopetrol hoy en día y que viene haciendo durante varios años, que están están totalmente desalineados o totalmente identificados con esa necesidad de seguir en el camino de la transición y habrá algunas cosas que acelerar y entonces, en ese sentido, esas conversaciones tendrán que continuar”, concluyó.