Cada año vuelve y juega. Pese a que en el país ha existido la suficiente ilustración, sobre ciertas especies que suelen utilizarse en temporada de Semana Santa, que están en la lista de prohibidas para ser comercializadas, debido a que algunas están en vía de extinción, de nuevo se repite la historia.
Este lunes 18 de marzo, las autoridades ambientales del Distrito, de la mano con la policía metropolitana, pasaron revista y empezaron a incautar palma silvestre, entre otras, que pretende venderse esta temporada, en particular para la celebración religiosa del domingo de ramos.
Según información suministrada por la Secretaría de Ambiente de Bogotá, en operativos de control adelantados por uniformados, fueron incautados más de 20 kilos de palma silvestre.
Las revisiones de control se hicieron en dos localidades de la capital del país. Dentro del plan de seguimiento al transporte, comercialización y tenencia ilegal de palmas silvestres, fueron recogidas del mercado especies como la palma de vino, que se pretendían vender en zonas de Usaquén y San Cristóbal.
Según las costumbres religiosas, el domingo de ramos se conmemora la entrada de Jesús a Jerusalén, jornada en la cual la gente le aplaudió y celebró batiendo palmas de especies de la época o ramas de olivo.
Con el tiempo, cada año en Semana Santa se revive ese episodio y se fue construyendo la tradición de hacer bendecir el ramo con agua bendita y guardarlo o colgarlo en algún lugar de la vivienda. Entre tanto, en las iglesias utilizan los ramos para elaborar la ceniza que el siguiente año se utiliza en el inicio de la cuaresma (el miércoles de ceniza).
En términos ambientales, se fue generando una presión sobre algunas especies. Por ejemplo, la palma de cera, que se usa para elaborar cruces y otras figuras alusivas a la fe, se protege, por ser el hábitat del loro orejiamarillo, que está en vía de extinción por la destrucción de esa planta.
Adriana Soto, secretaria de ambiente, confirmó que incrementarán los operativos previos y durante la Semana Santa.
Además, invitó a los ciudadanos a que no utilicen palmas sivestres en las celebraciones, en particular, la palma de cera, que fue declarada como árbol nacional, sin contar con que es la especie más alta del mundo y puede vivir más de 100 años.
La funcionaria del Distrito recordó que, tanto la palma de cera como la palma de vino son fuente de alimento de muchísimos animales.
Judicializaron ya
Así las cosas, las autoridades anuncian mano dura. De hecho, informaron que ya fue judicializado un ciudadano que movilizaba 15,5 kilogramos de palma de vino, de manera ilegal, luego de lo cual, tendrá que responder por el aprovechamiento ilícito de los recursos naturales renovables.
La secretaría de ambiente abrió las líneas de denuncia habilitadas: 601-3778853; 3182153114 o la línea 123.