Desde la semana pasada empezó a regir en el país la resolución del Ministerio de Salud que profundiza la reactivación en el país, luego de más de un año marcado por restricciones a la economía y, sobre todo, para el sector de comercio.
Yansen Estupiñán, presidente de la junta de San Victorino y gerente del centro comercial Gran San, indicó que la reapertura no se puede postergar así los contagios estén altos, pues el bolsillo de los comerciantes no da más.
En este famoso sector comercial se reportan afectaciones en las ventas del 90 %. Este es solo uno de los testimonios de varios sectores económicos del país que piden a gritos que se empiece a normalizar su actividad.
Sin embargo, aunque hay optimismo, a Estupiñán le preocupa que este anuncio de la reapertura sea un arma de doble filo.
“Me preocupa muchísimo que esto sea manejado con doble intención. Las UCI están al 92 % y no pueden decir ahorita que reabran que esto es por culpa del comercio, y que nos digan que hay que cerrar; esto se va a salir de las manos y no es por culpa del comercio”, aclaró el representante de los comerciantes de San Victorino.
También indicó que seguirán cumpliendo con todo lo relativo a protocolos de bioseguridad y los aforos, tal y como lo vienen haciendo desde el año pasado.
Estupiñán indica que la situación por la que han tenido que pasar los comerciantes de San Victorino desde el inicio de la pandemia es muy grave, pues a diferencia de otros sectores del comercio, estos no contaron con robustos sistemas de comercio electrónico, y pese a que han dado pasos importantes en este sentido, no es suficiente.
Según cifras de los comerciantes de San Victorino, el solo hecho de que no se puedan llevar a cabo los famosos ‘madrugones’ durante un mes, se generan pérdidas superiores a los $100.000 millones y además las ventas caen más del 70 %. Y es que cabe destacar que de estos ‘madrugones’ dependen los ingresos de unas 11.500 famiempresas, 4.500 establecimientos y 55 centros comerciales.
En este sentido, desde San Victorino piden a las autoridades que garanticen el funcionamiento del comercio para volver a potenciar el ecosistema comercial del sector.
Adicional a las restricciones impuestas por la pandemia, los comerciantes también se han visto bastante afectados por los bloqueos que se han dado en todo el país en el marco del paro nacional, pues los transportadores se han negado a llevar los productos a otras zonas del país. Además, muchos de los comerciantes de otras ciudades y municipios que venían a comprar su productos en esta zona han tenido dificultades para llegar al centro de comercio.
En este sentido, esperan que la situación de orden público se normalice rápidamente, para que la reapertura económica pueda darse de una mejor manera.
“Todo cansa y sabemos que no hay una claridad en la necesidad de la manifestación, pues esto está siendo utilizado por parte de algunas organizaciones y movimientos políticos para ganar adeptos, para sembrar dudas. Por eso, hoy decimos: ya basta, necesitamos que desbloqueen y nos sentemos a conversar”, concluye Estupiñán.