Luego de la reapertura de las relaciones comerciales entre Colombia y Venezuela, la nueva aspiración de la Casa de Nariño y el Palacio de Miraflores es lograr una mayor integración binacional y comenzarla por el sector mineroenergético, tal como lo hizo Europa en su proceso de convertirse en un bloque comunitario.

Así lo aseguró el presidente Gustavo Petro, tras reunirse el sábado 18 de noviembre con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro. “Es una integración real, así comenzó la Unión Europea, integrando carbón. Ahora ellos tienen que integrar energías limpias, nosotros ya podemos comenzar por allí. Desde la Guajira hasta Maracaibo, limpiando las aguas de los ríos de Colombia que van hacia el lago de Maracaibo y lo están acabando, trayendo también aguas de Venezuela, trayendo energías de Venezuela y llevando energías de Colombia hacia Venezuela”, sostuvo el mandatario y dijo que será una integración energética “histórica y fundamental para el desarrollo y la prosperidad de los dos pueblos”.

En ese proceso es muy probable que Ecopetrol se vuelva socia de PDVSA en la explotación de campos de gas en Venezuela y de campos de petróleo. “Esto con la idea de asegurar en ambas vías, energía eléctrica hacia Venezuela, materias primas fósiles hacia Colombia, quizás, pasando por Cali hacia el Asia; asegurando la seguridad energética de estos dos países”, reiteró Petro.

Igualmente, el jefe de Estado colombiano aseguró que “el año entrante, quizás, por pura paradoja, Venezuela va a ser uno de los motores de la reactivación de la economía nacional. Si las cosas van bien, si logramos sacar adelante una serie de esfuerzos comunes, Venezuela va a ser un motor de la misma economía colombiana”.

El anuncio lo hace justo en momentos en que la economía nacional tiene amenazas de recesión, con una caída de 0,3 % en el PIB del tercer trimestre de 2023. Como respuesta a este mal dato de crecimiento, Petro ha pedido aumentar la inversión pública e incluso suavizar la regla fiscal, pero al parecer ahora también estaría confiado en el comercio con Venezuela para volver a prender los motores del aparato productivo nacional.

Incoherente

El anuncio de la sociedad entre Ecopetrol y PDVSA ya empezó a generar reacciones, pues asociarse para buscar petróleo y gas iría en contravía de los planes del Gobierno Petro de no continuar con la exploración y explotación de combustibles fósiles para combatir el cambio climático.

Uno de los primeros en analizar este tema es el exministro Juan Camilo Restrepo, quien en su cuenta de Twitter advirtió de la incoherencia de prohibir explorar hidrocarburos en Colombia y ahora querer hacerlo en Venezuela. ¿Qué lógica hay en esto?, ¿es que acaso la capacidad de inversión de Ecopetrol es ilimitada?

Pese a lo anterior, el presidente Petro en su discurso tras el encuentro bilateral insistió en que lo que buscará será una “verdadera integración energética entre los dos países”, que se podría ampliar a Panamá, Ecuador y Brasil.

“Sin temor, vamos a dar los pasos de una verdadera integración energética de doble vía, porque construiremos proyectos de energías limpias, en los que el norte de Colombia puede ser abundante para transmitir energía eléctrica hacia el occidente de Venezuela, y traeremos de Venezuela energías que aún subsisten para tratar de mantener las deficiencias que puede haber en Colombia”, aseguró y explicó que se pueden traer materias primas para hacer más barata la gasolina colombiana y para sustentar la transición hacia las energías limpias a través del gas.

Estos planes se conocen además en momentos en que Ecopetrol presenta una caída de más de 40 % en sus utilidades, al tiempo que anuncia su intención de diversificar sus negocios hacia la producción de energías limpias como el hidrógeno verde.