Por lo que llaman ‘falta de ejecución de los acuerdos pactados desde 2019′, la Cámara Colombiana de la Confección y Afines pidió en este miércoles que se nombre un ministro de comercio ad hoc que se encargue de ponerse al día con los 8 puntos que, según dicen, les ha causado una grave afectación que impacta el empleo y que se recrudeció en la pandemia.
Camilo Rodríguez, presidente de la Cámara, en diálogo con SEMANA, señaló que mientras el sector va en declive, con 6.400 empresas formales que cerraron hasta el año pasado y 14.000 no formales que dejaron de operar debido a los altos costos que tienen que asumir, en Colombia no se están aplicando las medidas arancelarias con algunos productos que vienen del exterior, las cuales -desde su perspectiva- se habían previsto para proteger la industria nacional.
La agenda incumplida
El 14 de febrero del 2019, según cuenta Rodríguez, 46 empresarios del país se reunieron con el ministro de Comercio, José Manuel Restrepo, quien “se comprometió a sacar 8 puntos adelante”.
Entre los puntos que tienen en el visor los textileros representados por esa Cámara, están las medidas arancelarias, que para ellos es el punto crucial de toda la agenda del sector de las confecciones, pues, “las medidas arancelarias son para limitar el ingreso de materias primas y productos finales de otros países, especialmente de Asia, con el propósito de proteger a los productores nacionales”.
Otros puntos que tienen en capilla los textileros y que, según Rodríguez, ya deberían estar resueltos, se refieren a los incentivos para exportar; un IVA diferencial para las confecciones; la formalización del sector, teniendo en cuenta que el 74 % opera en la informalidad, y la lucha contra el contrabando, para mencionar los de más grueso calibre.
“Hasta el momento, el ministro no ha resuelto ninguno, por lo que pedimos al Gobierno nacional que nombre un ministro ad hoc”, señaló Rodríguez, y agregó: “el ministro se escuda en la pandemia, pero en 2019 las exportaciones del sector fueron 732 millones de dólares y las importaciones fueron de 2.428 millones de dólares. Importamos más de lo que vendemos. Es una balanza comercial deficitaria”.
¿Qué dice el ministro de Comercio?
Por su parte, el ministro Restrepo, al ser consultado por SEMANA sobre el reclamo de los textileros, indicó que “el pacto se ha venido cumpliendo adecuadamente, pues incluye temas de productividad, internacionalización, acceso a mercados. Todo esto se han venido ofreciendo a través de programas distintos, como las fábricas de productividad”, por ejemplo.
En relación con el tema arancelario, Restrepo fue enfático en señalar que, aunque se han planteado alternativas y se discuten con toda la cadena, “evidentemente aún no hay una alternativa final de estructura arancelaria que se debe aplicar”.
No obstante, el ministro resaltó que esa decisión se toma en un espacio que se llama el comité Triple A, que es el que define la política arancelaria y aduanera.
Allí, inclusive, se planteó una propuesta con la cual, algunos actores de la cadena se han mostrado en desacuerdo.
Al decir de Restrepo, “no es que se haya incumplido, sino que los aranceles no se fijan entre los actores. Si fueran por acuerdos con los actores no funcionaria la institucionalidad del país”.
Finalmente, agregó el funcionario, “la aplicación de los aranceles deben responder a un criterio técnico”. Es decir, no se pueden establecer a través de peticiones de cada sector.
‘El ministro no tiene la camiseta de la industria nacional’
Por el lado de los textileros, las cosas son de otro color. Según relata Rodríguez, además de la crisis que tenemos, por ingreso de productos importados a precios excesivamente bajos, también están enfrentado otro reto y es lo que se conoce como ‘paqueteo’. Esto no es más que una norma que fue expedida por el Ministerio de Comercio, según la cual, a Colombia puede entrar mercancía sin arancel y sin IVA cuando está no sobrepasa los 200 dólares.
En ese sentido, el ministro Restrepo señala que se trata de un tema distinto. “Este tema es parte del Conpes de comercio electrónico y está dentro de los compromisos que tenemos a través de acuerdos internacionales, justamente con el propósito de motivar el comercio internacional, en particular, el comercio electrónico”.
El funcionario agregó que “los datos iniciales que tenemos dan cuenta de que no tiene un impacto significativo y, no son importaciones con propósito comercial, precisamente por el bajo monto”.
Desde la perspectiva de la Cámara, entre tanto, todo lo que está sucediendo afecta a la industria nacional que “va en decaimiento, como lo muestran las cifras, según las cuales, la producción real cayó en 23,7 %, las ventas en 20,5 % y la generación de empleo cayó en 12,8 %”. Además, con un impacto que recae principalmente sobre las mujeres que son las que más trabajan en el sector de las confecciones.
Según sostiene Rodríguez, “es frente a eso que insistimos en la necesidad de un ministro ad hoc que nos permita sacar adelante el sector y no continúe la situación que hoy denunciamos y es que, después de 2 años y medio y 34 reuniones, aún no tengamos acciones concretas”.
El líder de la Cámara de Confecciones expresa el sentir de los integrantes de ese sector, según el cual, “el ministro de comercio no tiene puesta la camiseta de la industria nacional y, por el contrario, está privilegiando la mano de obra externa, en especial, la de países de Asia. No tiene la voluntad ni ha traducido sus propuestas en hechos concretos, por lo que solicitamos un ministro que si crea en la industria nacional y que ayude a la reactivación y la generación de empleo”.