Durante los últimos meses, las aerolíneas de bajo costo que operan en Colombia han manifestado su preocupación para continuar prestando sus servicios. Aun sin conocer el futuro para Viva Air, que es de recordar que suspendió operaciones desde el pasado 27 de febrero y que en solo en un día casi 18.000 pasajeros vieron frustrados sus viajes, y cerca de medio millón que habían comprado tiquetes para las próximas semanas y meses tenían en entredicho sus traslados, ahora Ultra Air le pide ayuda al Gobierno Nacional para seguir operando.
Ultra Air manifestó que sigue operando y defendiendo la democratización de la industria aérea colombiana, pero que se han visto muy afectados por la situación económica que atraviesa el país con una inflación del 13,28 %, según el reporte del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
“Como lo hemos manifestado en diferentes ocasiones ante los medios de comunicación y entes gubernamentales, la situación de la industria aérea es compleja dado los incrementos en los costos del combustible, la tasa de cambio, la inflación y la incertidumbre ante la suspensión de operaciones del operador del 25% del mercado”, indicó la compañía en un comunicado de prensa.
También puntualizan que siguen trabajando para obtener nuevos recursos de sus inversionistas y banqueros, ya que la salida de JetSmart del acuerdo firmado, puede obligarnos a ajustar la operación, caso en el cual estaremos contactando a nuestros clientes para minimizar los impactos que estos cambios puedan generarles.
Durante las últimas horas se conoció que no habrá negocio entre JetSmart y Ultra Air, pues JetSamart desistió de su intención de comprar Ultra Air. La aerolínea JetSmart anunció que canceló la carta de entendimiento suscrita para la adquisición.
Según la información suministrada a la opinión pública, JetSmart dice que, en consecuencia, se enfocará en “continuar su proceso de certificación como Operador Aéreo en Colombia, para lo que ya recibió el visto bueno de las autoridades aeronáuticas”.
Esta situación preocupó más a Ultra Air que reiteró la solicitud de apoyo al Gobierno Nacional con el fin de continuar prestando el servicio público esencial de trasporte aéreo de pasajeros, que es fundamental para la conectividad y el turismo, renglón primario de la economía de muchas regiones del país.
“Como empresa netamente colombiana, seguimos trabajando con nuestros 350 colaboradores directos, 1500 indirectos, proveedores, accionistas y las autoridades para defender el bajo costo en favor de todos los colombianos”, indicó la aerolínea de bajo costo.
Se cierra un capítulo
El proceso de compra de Ultra Air por parte de JetSmart es el cierre de un capítulo en el cual, no hubo las condiciones para una negociación.
Ortiz enfatizó en que ahora seguirán fortaleciendo la competencia, “como lo hemos hecho desde 2017 en Chile, Argentina y Perú, lo que nos ha permitido transportar ya más de 18 millones de pasajeros”.
Desde la perspectiva del presidente de la aerolínea, “creemos que la oferta del modelo JetSmart, con rutas directas entre ciudades secundarias, precios accesibles y una flota de aviones nuevos, tendrá un impacto muy positivo para todos los colombianos y la conectividad del país”.
Ultra Air, al igual que Viva, fue fundada por William Shaw, quien pidió pista para la nueva aerolínea desde 2020.
La aerolínea llegó con la intención de disponer de una flota de aviones Airbus A310 CEO y Boeing B737 MAX, con capacidad para 150 pasajeros en una sola clase. En 2022, tras culminar la cuarta fase del proceso de certificación adelantado ante la Aeronáutica Civil, el Gobierno colombiano autorizó la operación de la aerolínea Ultra Air.
Los permisos le daban vía libre para ofrecer el servicio de transporte aéreo regular de pasajeros, correo y carga en el país. Durante los primeros meses, Ultra Air activó una serie de promociones para conquistar el mercado colombiano. Tiquetes 2x1 o “solo por este día, pasajes a mitad de precio” estuvieron a la orden del día.
En las semanas recientes se conocieron los graves problemas financieros que enfrentaba Ultra Air y hasta el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, salió a decir que podría pasarle lo mismo que a Viva, luego de que la aerolínea, presuntamente, estaría dejando de atender algunas obligaciones. En su momento, los voceros de la compañía de transporte aéreo salieron a decir que estaban a la espera de una capitalización.