Desde hace algunos meses se ha anticipado el coletazo que tendría el país por cuenta del fenómeno de El Niño, que se presenta recurrentemente y afecta cosechas y hasta los servicios básicos.
Esa es una de las alertas que hizo recientemente la Asociación Colombiana de Grandes Consumidores de Energía Industriales y Comerciales (Asoenergía). Según esa entidad, con ese fenómeno climático se podría ver un desabastecimiento de gas, el impacto de precios de las tarifas.
Ante ese escenario, la directora ejecutiva de la entidad, Sandra Fonseca, hizo un llamado al Gobierno, para evaluar y establecer soluciones frente a esa situación.
“Aunque hoy tenemos un nivel de los embalses cercano al 60%, el problema que tiene el sistema es que no tiene una gran capacidad de reserva hídrica en términos de tiempo, y cómo no sabemos cuánto va a durar el fenómeno de El Niño, en muy corto tiempo se puede agotar la capacidad de reserva de los embalses”, comentó.
También afirmaron que en un evento como El Niño se dependerá de toda la capacidad instalada del país, como la generación hidráulica, a gas, carbón e incluso la generación a líquidos.
Aseguró también que en un día ordinario, la demanda en todos los sectores en el país es de 222 gigavatios hora/día y en términos de energía, la oferta actual está en los 225 gigavatios. Por ello, se genera una alerta para verificar la disponibilidad real del parque generador y que se revise la capacidad financiera asociada al cargo por confiabilidad.
“Estamos ante una posibilidad muy alta de que los precios tanto de bolsa como de contratos en términos de generación sigan subiendo, eso además de la presión de la actualización de tarifas por inflación, que sigue siendo demasiado elevada. Es decir, estamos enfrentando una incertidumbre en términos de lograr un balance suficiente de oferta y una situación donde los precios van a seguir subiendo”, agregó.
La directiva propuso que desde la regulación se debe permitir la flexibilidad del lado de la demanda, pues esto servirá como herramienta para que el sistema eléctrico del país pueda hacer frente a los cambios de la curva de duración de la carga. Aseguró que la señal de precios muestra una escasez inminente y creciente en el balance eléctrico, lo que supone una necesidad de aumentar la disponibilidad de la infraestructura.
La reciente decisión de incorporación de fuentes de energía renovables intermitentes, a menudo subsidiadas, como la eólica y la solar fotovoltaica, tendrán un profundo impacto en el sistema. Esta nueva capacidad de generación, aunque importante, no es ni fiable, ni flexible, ni predecible en todos los periodos de tiempo y, por tanto, profundiza la necesidad de flexibilidad de todos los demás participantes, y se traduce en un mayor costo total del sistema eléctrico”, agregó en el comunicado.
MinMinas también advirtió estragos por el fenómeno de El Niño
La funcionaria aseguró que en época del fenómeno de El Niño, generalmente las tarifas suben, sobre todo la de energía spot (de la bolsa de energía).
“Dado que hay unas empresas que están expuestas al mercado de la energía en bolsa, en esos mercados se suele incrementar la tarifa y lo suele experimentar el usuario final”, dijo la funcionaria, describiendo un escenario muy posible en el país.
Sin embargo, la ministra también describió una de las estrategias que se utilizan en el momento en que empiezan a incrementar las tarifas.
“En ese momento (cuando suben las tarifas) se pone un precio de techo, que es el máximo precio en el que se transa la energía. La diferencia entre ese precio de escasez y el precio real de la generación de energía se paga con el cargo por confiabilidad”.
Además, aseguró que a través de un mecanismo que está desarrollando el Ministerio, invitan a las generadoras a que estas puedan venderle, con contratos de largo plazo, a las comercializadoras, “de tal forma que a la comercializadora no le toque salir al mercado en bolsa a comprar una energía altísima”, comentó.