La capacidad de hacer lo que quiera con su vida se logra con la independencia financiera, sin depender de fuentes de ingresos exteriores pues tiene la capacidad de soportar gastos a partir del propio capital.

Por tal motivo, es tener los recursos económicos, la flexibilidad y seguridad que permitan actuar sobre lo que quiera sin estar limitado por las finanzas, es tener el dinero suficiente para permitirse el estilo de vida que desea.

Sin embargo, dijo Iván Torroledo, cofundador de Littio, que como los grandes proyectos, lograr la independencia financiera implica organización, compromiso y dedicación. Y si bien no se trata de un objetivo de alcance inmediato, tampoco se trata de uno asequible “para pocos”.

Qué debe tener en cuenta

Por un lado debe entender en dónde se encuentra financieramente. Al igual que el primer paso para crear un plan de ahorro, necesita entender sus finanzas.

Esto significa dimensionar en qué lugar te encuentras en el camino hacia la independencia financiera para identificar cuál es el ingresos mensual, en qué y qué cantidad gasta y las deudas que tiene.

También debe crear y ejecutar un plan de ahorro. Uno de los principios fundamentales en finanzas personales es el ahorro. Independientemente del monto con el que decida o pueda comenzar, destinar una parte de los ingresos a un fondo de emergencia o un fondo para un objetivo específico resulta casi tan importante como la cantidad de ingresos que reciba.

Un fondo

También es importante construir un fondo de emergencia. Una de las formas más exitosas de garantizar la seguridad financiera es crear un fondo de emergencia.

Entendido como un fondo al que puede acudir, como su nombre lo dice, en caso de emergencia, es un fondo que debería mantener en una segunda billetera y que debería cubrir al menos el total de gastos necesarios de tres a seis meses.

Por ejemplo, si sabes que los gastos obligatorios corresponden a $1.500.000 de manera mensual, debería crear dentro del plan de ahorro un objetivo que le permita alcanzar un valor de $4.500.000 a $9.000.000 y que solo debería tocar en caso de emergencia.

De igual forma, suponga que dentro del plan de ahorro tenía el objetivo a corto o mediano plazo de obtener lo suficiente como para comprar un celular. Ahorró de manera juiciosa y comprometida, cumplió el objetivo, pero también gastó una parte de los ahorros. La clave es nunca dejar de tener objetivos y así nunca dejar de ahorrar.

Los objetivos no tienen que ser necesariamente a corto plazo; podría tener, además del celular, el objetivo de ahorrar para la cuota inicial de un apartamento. Entonces, ahora que ya no tiene que destinar ingresos al ahorro para el celular pero se dio cuenta de que ese monto no lo necesita para vivir; destínelo al fondo de emergencia o al ahorro de cuota inicial del apartamento; no lo convierta en un gasto.

Lo más importante es nunca dejar de ahorrar. Revisar y ajustar el plan de ahorro es muy importante porque mientras la carrera y trayectoria crecen, así como la diversificación de ingresos, más ingresos tendrá. Así, podrá ajustar los objetivos mensuales a la cantidad de dinero que entre a la cuenta y alcanzar objetivos cada vez más rápido.

Piense en el futuro

De igual forma, al igual que ahorrar y lograr la independencia financiera, invertir es más sencillo de lo que se imagina y es una de las mejores formas de generar ingresos pasivos mientras el dinero y capital crecen con el paso del tiempo.

Existen distintos tipos de ahorros, lo importante es diversificar con aplicaciones gratuitas, que permitan, por ejemplo, guardar los ahorros en dólares digitales en una cuenta global sin cuota de manejo ni costos ocultos.