A mitad de año, tradicionalmente estudiantes y trabajadores tienen una temporada de descanso. Las vacaciones de junio y julio suponen un gasto extra para muchas familias colombianas, sin embargo, planificar los viajes y consumos pueden representar un ahorro para el bolsillo.
En Colombia, como en otros países del mundo, se ha presentado un fenómeno inflacionario que ha subido los precios de bienes y servicios, lo cual afecta las finanzas de las personas, pero en la economía colombiana la reactivación y el consumo están vigentes.
Es por esto que, si una persona tiene planeado viajar en estas vacaciones, la principal recomendación del equipo de salud financiera de BBVA en Colombia es elaborar un presupuesto y procurar cumplirlo según los recursos con los que cuenta.
Es importante tener en cuenta que hay valores de gastos que se pueden conocer previamente, como el costo de los tiquetes, alojamiento, transporte público y las entradas a museos o sitios turísticos.
Pero, también hay costos variables como la alimentación y demás actividades que se llevarán a cabo durante el viaje y que pueden salir de imprevistos. Para este tipo de situaciones, se aconseja tener un promedio de gasto que puede estar determinado por la experiencia que tenga en los consumos anteriores.
Bajo ese contexto, reservar los tiquetes y el alojamiento con tiempo resulta muy útil, pues entre más días de anticipación se tengan en cuenta para hacer las reservas, mayor será la oferta que se pueda encontrar. Además, es posible acceder a promociones y descuentos relacionados con medios de pago, como son las tarjetas de crédito.
Medios de pago y otras opciones de ahorro
A la hora de realizar compras o transacciones en época de vacaciones, también es clave que las familias colombianas tengan en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Si se hacen compras en el exterior con la tarjeta de crédito, ese cobro será en dólares y el cambio puede variar entre el momento de la compra y el pago. Actualmente, el dólar en Colombia se cotiza sobre los $4.100.
- No cargar grandes cantidades de efectivo y si se viaja al extranjero, es mejor revisar los montos de dinero autorizados por las autoridades de aduana para salir del país y para ingresar al lugar que se visita.
- Los colombianos deben tener en cuenta que esta es considerada una temporada alta, período en el que aerolíneas y hoteles incrementan sus tarifas.
- Reservar el monto del dinero que se necesitará para cubrir los gastos inmediatos que se encontrarán al regreso de las vacaciones como son, por ejemplo, servicios públicos, cuotas de vivienda o vehículo y mercado.
- Administrar el dinero y vigilar los pequeños gastos diarios. Es útil controlar esos pequeños gastos que se hacen sin darse cuenta, y que los expertos llaman gastos ‘hormiga’. Puede ser un dinero que acabe comprometiendo el presupuesto de las vacaciones.
¿Cómo hacer un presupuesto personal y no fallar en el intento?
El portal Rankia consigna que para lograr objetivos en la vida que desean hacerse realidad, como ir de viaje, comprar una vivienda o empezar a tomar un curso, una de las vías de acceso más recomendadas es a través de la estimación de un presupuesto.
En palabras de los conocedores del tema, “un plan financiero es donde se registran los ingresos, gastos, ahorros y deudas, para luego cuantificar y determinar cuánto dinero se consume en el día a día y cuánto dinero se ahorra”.
Para hacer un buen presupuesto hay que dedicarle tiempo y tener a la mano extractos bancarios, recibos o cualquier información de gastos, pues entre más datos mejor. Luego de esto, se debe tener en cuenta los siguientes pasos:
1. Clasificación de la información: separar los ingresos fijos, como el sueldo mensual, de los variables que representan bonificaciones extras. Asimismo, establecer cuánto se podría ahorrar y destinar de algún modo un dinero para invertir.
2. Gastos: el portal 123 Dinero detalla que un presupuesto no es sinónimo de dejar de vivir, pero sí es necesario separar los gastos y se pueden comprender de la siguiente forma:
- Gastos fijos: los que hay que hacer cada mes sin excepción.
- Deudas: pagos de préstamos o créditos.
- Gastos Variables: los que cada mes van a cambiar según el consumo.
- Gastos de ocio: actividades extracurriculares, de entretenimiento y demás.
3. Finanzas personales actuales: para los especialistas, un presupuesto personal implica cuestionarse: ¿mis ingresos son superiores a mis gastos?, ¿tengo ahorros?, ¿las deudas se llevan gran parte de mis ingresos?, ¿en qué categoría gasto más dinero?
Después, al tener los datos numéricos, se prosigue a definir los objetivos financieros. Rankia dice que es lo más importante en un presupuesto, ya que esto es lo que hace que un sujeto se restrinja a no gastar más de lo que tiene.
4. Ejecutar y revisar: luego de conocer los términos, situación financiera y la definición de los objetivos, los expertos dicen que hay que comprometerse a cumplir con lo que se propone.