Los movimientos alcistas en la tasa de cambio siempre generan preocupación entre los ciudadanos, más aún cuando el precio de una gran cantidad de bienes y servicios que se consumen se encuentran atados al dólar estadounidense o una moneda extranjera fuerte como el euro.
Cuando se trata de viajar, como en cualquier otro proyecto en la vida, se requiere planearlo con tiempo y realizar un presupuesto adecuado, justamente con el fin de evitar que la devaluación lo haga más costoso. Siendo así y en el mundo ideal, un buen plan o presupuesto ayudará a evitar que el golpe de la tasa de cambio genere serias dificultades a la hora de pagar.
Justamente parte del plan puede iniciar por ahorrar en dólares de manera gradual, es decir, si requiere por ejemplo 5.000 dólares, puede acumular 500 durante 10 meses, esto hará que si, por ejemplo, la tasa de cambio a última hora sube 200 pesos, usted eventualmente logre un ahorro cercano a 1 millón de pesos, que son útiles en todo momento.
Es bueno que cotice varias veces en diferentes momentos del tiempo en casas de cambio para la compra de dólares, es posible que encuentre días donde la oferta de la divisa sea alta y se den precios cómodos que se ajusten mucho mejor a su presupuesto. Procure no dejar para última hora el cambio de la moneda, ya que, si lo hace, por ejemplo, en el aeropuerto es posible que encuentre tasas de cambio superiores a la media del mercado.
Dado que los pasajes aéreos y los planes turísticos ocupan la mayor parte del dinero que se gasta en un viaje, procure hacer la compra de manera oportuna en pesos de contado o si acude al crédito igual que sea en pesos porque de manera anticipada tendrá claridad frente a los pagos en la divisa en la que usted tiene sus ingresos. De hacerlo en dólares se expone a que ante subidas fuertes de las divisas deba cancelar mensualmente más pesos en su moneda local.
Si bien es cierto, la tarjeta de crédito es un instrumento útil y muy necesario para viajar, se sugiere usarla solo para lo estrictamente necesario en el exterior, ya que la liquidación en moneda local se realiza a la TRM que usualmente ha resultado ser superior al precio del dólar en casas de cambio. En este punto será mejor pagar en efectivo la mayor cantidad de gastos y dejar la tarjeta como un instrumento de respaldo.
Si es a última hora
Si no ha hecho algún plan o presupuesto con anticipación y simplemente tiene que viajar con una tasa de cambio alta, muy seguramente tendrá que acudir a la austeridad y bajar la calidad de hoteles y restaurantes. Igualmente, bajar al mínimo la posibilidad de comprar alguna clase de obsequios o regalos para sus personas cercanas. Adicionalmente, es posible que se tenga que abstener de pronto de comprar algún bien que se encuentre en promoción, dado que la caja disponible no alcanza y no resulta recomendable acudir al crédito en moneda extranjera justo cuando está subiendo la tasa de cambio.
Una alternativa interesante en momentos de alta fortaleza del dólar estadounidense o del euro es acudir a destinos internacionales en Latinoamérica, que por su cercanía y devaluación similar de sus divisas hace que no se sienta de manera significativa el cambio. Por ejemplo, México es uno de los países donde suele rendir mucho el dinero o incluso Chile que, con sus recientes niveles de devaluación, ha llevado al peso chileno cerca de los 1.000 pesos, pueden llegar a ser un destino atractivo.