Avianca aún no puede cantar victoria. El mercado aéreo sigue recuperando velocidad en ocupación y reactivación de rutas, factores que contribuyen a mejorar el flujo de caja y mantener irrigado el negocio. Sin embargo, la rentabilidad y el control de las deudas son los dos retos más importantes de Avianca, y en general de la industria.
La clave estará en el plan de vuelo que diseñe cada compañía para salir de la crisis. La mayoría de las compañías están optando por aumentar el flujo de caja castigando la rentabilidad, algo que se ve reflejado en los balances de estos días.
En el caso de Avianca Holdings, la compañía reportó pérdidas en el primer semestre por 653 millones de dólares, una cifra superior a la reportada al cierre del año pasado, cuando reportó pérdidas por 2.025 millones.
Claramente, la situación y la fotografía financiera del momento es difícil. La empresa no ha logrado reducir la deuda (deuda y porción corriente de deuda a largo plazo), la cual ya va en 6.746 millones de dólares, que incluye nuevos préstamos por 370 millones y el deudor en posesión (DIP) por 2.170 millones.
Al 30 de junio de 2021, la deuda total de las compañías que se acogieron a la protección bajo Capítulo 11 era de 4.205 millones de dólares. Claro, todo está atado al desarrollo del plan de salida y rescate que se plantea y tramita ante una corte federal de Estados Unidos, como parte del Capítulo 11 de la ley de quiebras de ese país.
Según la nota 14, referida a la deuda de la compañía, al 31 de diciembre de 2020 Avianca realizó una reclasificación de la deuda de largo a corto plazo por 2.073 millones de dólares por efecto en incumplimiento en las condiciones de los préstamos, derivados en las decisiones de no pago originadas por las medidas tomadas para preservar la caja del Grupo como consecuencia de covid-19.
“El 20 de marzo de 2020 suspendimos unilateralmente algunos pagos de amortización de deuda por $210 millones de dólares. Se suspendieron pagos acumulados de rentas de aeronaves bajo arrendamiento operativo por 237 millones de dólares (al 31 de diciembre de 2020 por $157 millones)”, indicó la empresa en sus estados financieros consolidados.
Asimismo, los ingresos operacionales del primer semestre de 2021 fueron de 808 millones de dólares, inferior a los 1.180 millones de dólares reportados en el mismo periodo de 2020.
Aunque los nubarrones y la turbulencia se mantienen, en el radar de la compañía hay previsión de un mejor tiempo.
Avianca mantuvo casi 1.000 millones de dólares de liquidez, transportó 2,6 millones de pasajeros y por primera vez desde la reanudación de las operaciones aéreas en septiembre de 2020 la compañía alcanzó un factor de ocupación superior al 71 % en sus rutas. Además, la unidad de negocio registró un comportamiento positivo para el holding y generó ingresos por 176 millones de dólares durante este trimestre.
¿Y qué viene para la empresa? El 10 de agosto de 2021 la junta directiva de Avianca Holding S. A. aprobó la presentación del plan de reorganización y la declaración de divulgación anexa al Plan ante el Tribunal de Bancarrota de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York. Por otra parte, la celebración de la audiencia en la que el Tribunal considerará la aprobación de la declaración está programada para el 14 de septiembre de 2021.
Esa será una fecha clave para la empresa. El otro momento determinante de la empresa será cuando los acreedores aprueben el plan y –en palabras muy de la calle– suelten el dinero. El camino de la empresa aún tiene algunos escollos.
Otro hitos relevantes
• Avianca nombró este año a Adrian Neuhauser como presidente y CEO, y a Rohit Philip como Chief Financial Officer. Neuhauser, con más de 20 años de experiencia y tras supervisar el proceso de reestructuración de la compañía como vicepresidente ejecutivo corporativo y vicepresidente financiero, llegó en abril a liderar como CEO la salida del Capítulo 11 y la consolidación de una nueva oferta con precios competitivos, productos simples y la mayor red de rutas. A su vez, Philip con extensa experiencia en líneas aéreas se unió como Chief Financial Officer para ser parte del fortalecimiento de la posición financiera de la compañía.
• Expansión de la red de rutas con nuevos destinos desde regiones: durante julio Avianca inauguró vuelos directos entre San José y Miami; Medellín y Cancún; Medellín y Punta Cana, y Cali y Orlando.
• Retoma de operación de doce rutas internacionales: la aerolínea retomó los vuelos directos desde Bogotá a Fort Lauderdale, Washington, Los Ángeles, San Juan de Puerto Rico, Ciudad de Panamá, La Paz y Santa Cruz de la Sierra; desde San Salvador a Ciudad de Panamá, y desde Ciudad de Guatemala a Tegucigalpa. De la misma forma, en julio retomó parte de su operación a Brasil.
• Certificación Diamante a protocolos de bioseguridad: Avianca recibió el más alto reconocimiento por parte de APEX Health Safety por el estándar de los procesos y protocolos establecidos en Avianca BioCare para la prevención del contagio de covid-19.
• Lanzamiento del piloto IATA Pass Travel en viajes internacionales: Avianca se convirtió en la primera aerolínea del continente en lanzar, en alianza con la IATA, este pasaporte digital que permite a los viajeros almacenar los requisitos de pruebas covid.
• Pasajeros LifeMiles acumulan más millas por servicios adicionales: con el propósito de premiar la fidelidad de los clientes, por la compra de servicios adicionales, los socios afiliados a LifeMiles ganan 5 millas por cada dólar invertido.