La cotización del bitcóin se desplomó este lunes, nueve de mayo, a su nivel mínimo en más de nueve meses, lastrado por los temores de los inversores y arrastrando consigo a las otras criptomonedas.
Tras un 2021 en el que batió récords, el bitcóin está atravesando varias dificultades en 2022: con su caída de 4,3 % este lunes, hasta los 32.762 dólares hacia las 11:25 GMT (hora del meridiano de Greenwich), había perdido casi un tercio de su valor en lo que va del año y más de un 50 % desde que alcanzó su máximo histórico.
“Hay una correlación con los activos de riesgo que es evidente, sobre todo el Nasdaq”, el índice bursátil estadounidense que agrupa a numerosas empresas tecnológicas, dijo Neil Wilson, analista en Markets.com.
Esos activos se ven socavados por la perspectiva de un endurecimiento de la política monetaria en Estados Unidos, pues el grifo de la abundante liquidez que había impulsado un aumento de las valorizaciones se cerrará con los aumentos de las tasas de la Reserva Federal estadounidense (Fed).
Como el bitcóin, las otras criptomonedas también sufrieron pérdidas. Por ejemplo, el valor de ethereum bajaba un 7,4 %, a 2.382 dólares este lunes. Por su parte, el valor de la criptomoneda polkadot caía un 6,7 %, mientras que el cardano registraba una disminución del 8,4 % en su valor.
Según el portal Coingecko, que monitorea la valorización de más de 13.000 criptomonedas, el mercado representa ya un poco más de US$1.500 billones, frente a los más de US$3.000 millones de noviembre de 2021, cuando alcanzó su pico máximo.
Los cinco fraudes más comunes en el mundo de las criptomonedas
Los criptoactivos han tomado bastante popularidad en los últimos años, fomentando el interés en invertir a cualquier tipo de persona, sin importar su nivel de educación o condición socioeconómica. Pero este boom también ha sido la puerta de entrada para que tanto estafadores como hackers aprovechen el desconocimiento para crear modelos fraudulentos alrededor de estas divisas electrónicas.
Para el director de Operaciones de Bitpoint para Latinoamérica, Julián Geovo, una de las claves para que los ciudadanos no sean víctimas de este tipo de crímenes, es que sean precavidos. Por eso, hace un recuento de los fraudes más comunes con este tipo de divisas digitales.
1. Esquemas Ponzi o “pirámides”: durante años ha sido el más popular y utilizado con diferentes tipos de activos. Usualmente, lo que hacen los estafadores es pedir un dinero inicial a los inversionistas en forma de “paquetes” que dan rendimientos garantizados, ya que se realizan a través de criptomonedas, y serán manejados por “verdaderos expertos” del sector. No obstante, los rendimientos que se empiezan a obtener están financiados con el dinero de otras personas que son la base de la pirámide.
2. Rug Pull: es muy común con proyectos emergentes. Normalmente, se da en proyectos nuevos, poco sólidos y que buscan inflar rápidamente el precio del activo, normalmente hecho artificialmente, para luego abandonar el proyecto e irse con todo el dinero del mismo.
Es muy importante que al estudiar cualquier proyecto emergente se vea en detalle el roadmap del proyecto, el cumplimiento del mismo y la etapa en la que se encuentra, así como evaluar el problema que resuelve el proyecto y el equipo que está detrás. Esto último es lo más relevante, dado que se debería tener extrema precaución con proyectos sin ningún respaldo reputacional de sus creadores.
3. Cursos mágicos: si bien la educación online ganó terreno en los últimos años y es un mecanismo válido, el desconocimiento generalizado por el conocimiento sobre el mundo cripto ha hecho que muchas personas compren cursos “fachada” que tienen contenido pobre o nulo. En ese caso, es clave consultar quién está detrás de la capacitación para adquirirlo.
4. Perfiles falsos en redes sociales: en este caso, se replican perfiles de redes sociales de empresas reconocidas o de diferentes personalidades como Elon Musk, en donde se incita a la compra de criptomonedas o se pone a disposición de los usuarios cuentas bancarias o billeteras cripto para que transfieran valores. Por lo tanto, siempre se debe verificar cuáles son las cuentas oficiales de la empresa.
5. Phishing: los estafadores suelen usar sitios web idénticos a los oficiales, así como correos electrónicos, mensajes de texto o redes sociales para capturar información personal y de acceso a cuentas de usuarios desprevenidos que ponen sus datos en este sitio y al entrar encuentran error, pero realmente toda su información quedó capturada con el propósito de ser utilizada en el sitio oficial.
*Con información de la AFP.