El pasado 24 de marzo, la firma paisa Mineros anunció que ya formalizó ante las autoridades de valores canadienses su intención de vender acciones ordinarias en la plaza bursátil de ese país para conseguir US$ 25 millones.

Se convertiría así en la primera firma colombiana que sin operar en Canadá emitiría en ese mercado. Hasta ahora, solo existe el caso de firmas con intereses en ambos países inscritas en la Bolsa de Toronto (Toronto Stock Exchange, TSX) y en la Bolsa de Valores de Colombia (BVC).

Eso ocurrió con las petroleras Pacific, Petrominerales y Canacol. Las tres fueron acciones muy líquidas, porque tenían el impulso de inversionistas canadienses y colombianos, pero tras la salida de Pacific (que a su vez era dueña de Petrominerales) hoy solo queda Canacol.

También hay varias empresas productoras de cannabis medicinal, con cultivos o laboratorios en Colombia y que cotizan en la bolsa canadiense, como Khiron, Avicanna, Ikänik Farms y PharmaCielo. El caso de Mineros es especial, pues, aunque ya está listada en la BVC, planea una emisión en ambos mercados una vez le aprueben el ingreso a la TSX (en el país iría por otros US$ 10 millones).

El dinero que consiga financiará la adquisición del 50 % que le falta de Royal Road Minerals para explorar la mina Luna Roja en Nicaragua.

Con esta operación, expertos bursátiles, como Andrés Moreno, estiman que la acción de Mineros podría pasar a ser la cuarta más líquida del país después de Aval, Ecopetrol y Bancolombia, las cuales también se mueven bien gracias a que se cotizan en Wall Street.

Justamente, la posibilidad de obtener financiación de inversionistas internacionales es uno de los argumentos de la Bolsa de Toronto para que más empresas colombianas hagan lo mismo que Mineros. Guillaume Légaré, director para América del Sur de TSX, explica que al estar allí tienen la ventaja de cotizarse en una plaza especializada en sectores como el minero.

Guillaume Légaré, director para América del Sur de TSX.

De hecho, en TSX hay 29 empresas de ese ramo inscritas con operación en Colombia, donde poseen 57 propiedades mineras. Estas recaudaron US$ 191 millones de capital social tan solo en 2020. De los 3.289 emisores de la Bolsa de Toronto, 1.146 pertenecen al sector minero, y de ellos 96 son de nacionalidad distinta a la canadiense.

“Nuestra bolsa tiene 168 años de historia, y el año pasado levantó US$ 43.000 millones de capital, lo que es una suma interesante si se tiene en cuenta que Canadá tiene menos de 40 millones de habitantes”, explica Légaré. Al mismo tiempo, insiste en la importancia que le dan al sector minero, la cual los llevó en 2019 a ser el primer grupo bursátil internacional en establecer presencia en Suramérica.

Se instalaron en Perú para explorar oportunidades en toda la región. En Colombia, en particular, ve potencial en minerales y metales necesarios para la revolución de la energía limpia. “El país tiene la oportunidad de jugar un papel clave en un futuro bajo en carbono, y su éxito depende del acceso a capital”, enfatiza.

Una de las ventajas de la bolsa canadiense es que tiene dos niveles de inscripción. Uno inicial para el mercado junior TSXV (sigla de TSX Ventures). El siguiente nivel es el del mercado principal TSX. Eso les permite a las empresas ingresar de una forma más fácil y avanzar en su desarrollo bursátil. Hasta la fecha, más de 700 compañías han realizado esa transición, y cerca de 52 % de las mineras de TSX son graduadas de TSXV.

La meta de esta plaza bursátil no solo es que lleguen mineras o petroleras, sino también firmas de base tecnológica (startups) o dedicadas a la innovación, que es el caso de las productoras de cannabis medicinal, a las cuales les queda más fácil arrancar en el mercado junior.

Frente a la posibilidad de que las compañías de la región prefieran inscribirse en el exterior y no en sus respectivos países, afectando las bolsas latinoamericanas que están urgidas de nuevos emisores, Légaré opina que más que una competencia es un trabajo conjunto con miras a los mercados globales.

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Esto porque las empresas que cotizan afuera ayudan a captar recursos hacia sus mercados de origen. Precisamente, para ganar mayor relevancia internacional, las bolsas de Perú, Colombia y Chile están en proceso de fusionarse para crear una sola plaza bursátil que logre ser más líquida y con mayor presencia internacional.

Mientras ese plan se convierte en realidad, las compañías nacionales tienen oportunidades en bolsas como la de Canadá y así atraer más inversión extranjera al país.