Con un precio del dólar que este año ha alcanzado máximos históricos, por encima de los 4.600 pesos y una inflación de dos dígitos (10,21% a julio), el poder adquisitivo de los colombianos se está disminuyendo no solo en comparación con otros países, sino también internamente. Esa situación ha llevado a numerosas personas a considerar la posibilidad de pasar parte de sus ahorros a una ‘moneda dura’ como la estadounidense.
La primera opción es comprar billetes contantes y sonantes en las casas de cambio, cuyo valor suele ser un poco más barato que el de la tasa oficial, conocida como TRM. Si bien es una práctica generalizada, al punto que muchos guardan un billete verde en sus billeteras, cada vez más personas eligen opciones distintas al efectivo, no solo por el riesgo de falsificaciones, sino también por el riesgo de tener elevadas sumas de dinero guardadas en la casa.
Esto les abre las puertas a alternativas de ahorro en dólares que no son nuevas, pues ya muchos bancos locales las ofrecen, pero que sí han venido innovando en cuanto al acceso y al valor mínimo de la inversión. Un informe del diario La República indica que, a través de sus filiales en el exterior, entidades como Bancolombia, Banco de Bogotá, Itaú, Davivienda y Helm Bank exigen desde 5.000 dólares en adelante para abrir una cuenta en el exterior.
Ese requisito limita la cantidad de interesados, pues hoy son más de 20 millones de pesos, que muchos no tienen disponibles. Así que, al igual que en otros negocios, las empresas de base tecnológica están irrumpiendo en este mercado. Se les conoce como Fintech y su apuesta es permitir el acceso a dólares físicos o digitales, con inversiones mucho más bajas.
Una de ellas es la chilena Global66, que hoy ya se encuentra en siete países de la región, y en Colombia trabaja con licencia de Sociedad Especializada en Depósitos y Pagos Electrónicos (Sedpe). Su oferta consiste en una billetera digital multimoneda. Sus usuarios recargan su cuenta en su moneda local y ya en la plataforma pueden convertir su saldo en cualquiera de las monedas disponibles, como dólares, pesos chilenos o pesos mexicanos. Así mismo pueden hacer transferencias bancarias a otros países.
“Buscamos democratizar el acceso al mundo financiero, ofreciendo productos y servicios sencillos, digitales, asequibles y sin fronteras. Frente al contexto actual del país, el principal motivo para convertir a dólares es proteger el dinero de la devaluación y aprovechar para resguardarlo en una moneda más estable”, puntualizó María Camila Gómez, country manager de Global66 para Colombia.
Modelo de negocio
Gómez Explica que su negocio está en la comisión que ganan por hacer el cambio de la moneda y que, a diferencia de otras billeteras electrónicas, en su caso no respaldan sus transacciones con dólares digitales, sino con dinero en efectivo, también conocido como Fiat. El plan de esta Fintech es convertirse en un banco digital, con el que a futuro sus clientes no solo puedan acumular saldos en la moneda que requieran, sino que también les sirvan para hacer pagos. Por ahora, cuando la persona quiere hacer uso de los dólares que tiene ahorrados en Global66, debe realizar un giro a su cuenta de ahorros tradicional en el país y allí estos son convertidos a pesos.
Otra Fintech, que recién llegó al país para permitir ahorros en dólares es la estadounidense Dollarize, la cual está regulada por FinCEN, una oficina del Departamento del Tesoro en ese país. En su caso, el monto mínimo de apertura son 5 dólares. Su CEO, Diego de la Campa, explica que también ofrecen servicios para enviar y recibir recursos entre personas en diferentes países y que a futuro planean expedir una tarjeta.
Si bien con las Fintech, cada vez existen más alternativas de inversión y de acceso más sencillo, la clave antes de elegir está en entender bien su funcionamiento y en especial, cómo retirar el dinero en el momento en que se necesite. El dólar siempre será una opción para diversificar el ahorro y teniendo presente la máxima de no poner todos los huevos en una misma canasta.