Que levante la mano el que no ha soñado con vivir de la renta, manteniendo un estilo de vida constante en el tiempo. Seguro que muchos, por no decir que todos, en algún momento de sus vidas lo han pensado.
“La independencia o libertad financiera no necesariamente significa ganar muchísimo dinero. Es que si, eventualmente, con mi nivel de ingresos, aun si algo negativo llegara a ocurrir, yo pueda seguir viviendo con el mismo nivel. Que yo no tenga la premura de salir corriendo a conseguir trabajo o a conseguir una fuente adicional de ingresos”, explica Juan Camilo Rivera, director de la carrera de Finanzas de la Universidad Javeriana.
Para hablar de libertad, independencia o felicidad financiera, como algunos la llaman, es necesario tener un equilibrio entre las deudas, las obligaciones o gastos y los recursos de los cuales se vive. Esas deudas deben ser catalogadas como buenas y sanas, pero además no deben representar más del 30 por ciento de los ingresos.
Andrés Moreno, analista bursátil y profesor de finanzas personales de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario, explica que las deudas buenas son, por ejemplo, las destinadas a un inmueble, a estudio o al crecimiento de un negocio. Estas deudas generarán unos retornos futuros, que servirán para pagar esas mismas obligaciones. Y son sanas cuando las tasas de interés son relativamente bajas.
Es además enfático en aclarar que, para hablar de libertad financiera, la persona no debe estar sobreendeudada. “Es indispensable no estar trabajando para pagar un sobreendeudamiento o una megatasa de interés, sino tener el control de las deudas”, reitera.
Pero, ¿cómo alcanzar esa libertad financiera? Para lograrla, lo recomendable es tener una estrategia y aplicarla lo más temprano posible. Por eso, es necesaria la planificación. Hay que establecer objetivos a corto, mediano y largo plazo para poder mantener un foco estable y claro.
Cuidar los gastos
Lo primero que los analistas se apresuran a afirmar es que la independencia financiera es para todo el mundo, no está reservada para unos pocos.
Son varias las estrategias que recomiendan para quienes quieren llegar a ese estado, pero hay una regla de oro: gastar menos de lo que se gana e invertir la diferencia.
Hay que organizar las finanzas, saber cuáles son los gastos urgentes e importantes, tener claro cuánto le cuesta vivir y su entorno, manejar los presupuestos.
En la filial colombiana del neobanco brasileño Nu explican que es fundamental organizar las cuentas y el gasto, incluyendo los gastos periódicos o permanentes, como el arriendo o la hipoteca, las cuotas mensuales de tarjetas de crédito, el seguro médico, los pagos del vehículo, los servicios básicos del hogar, el celular y la televisión paga, entre otros.
Y Rivera agrega que es recomendable asignar cada mes un rubro para los llamados gastos hormiga, que son esos deseos que surgen: ir a cine, café con amigos, fiestas, salidas a comer, entre otros. El objetivo es tener control sobre ese tipo de gastos y asignarles un monto específico.
Esta organización, poner las cartas sobre la mesa y tener las cuentas claras, le permitirá destinar parte de su ingreso al ahorro.
“El ahorro es clave para tener una buena salud e independencia financiera. Muchas personas se han acostumbrado a gastar todo lo que ganan, e incluso más, generando endeudamiento y sobreendeudamiento. Y una de las mejores maneras de ahorrar e invertir es destinar a ese objetivo un porcentaje del sueldo”, recomienda Ana María Sierra, gerente de Responsabilidad Corporativa y Educación Financiera de BBVA en Colombia.
Y a la hora de invertir, es importante diversificar, es decir, no poner todo el dinero en una misma canasta, sino dividirlo en varias partes para poder obtener mejores resultados.
Precisamente, otra de las estrategias que recomiendan los expertos es reinvertir los beneficios de las inversiones que se hayan hecho. En otras palabras, poner a trabajar el dinero que esté rentando de las inversiones iniciales. “Esa rentabilidad también está sumando en el objetivo. Ya no soy yo solo, sino que ahora somos dos trabajando: por un lado, yo con lo que ahorro, y por el otro, los intereses que voy ganando, los retornos por mis inversiones. Así somos dos fuerzas. Pero hay algo importante: ser cautelosos con el riesgo de esas inversiones, y para ello, están los asesores”, señala el director de la carrera de Finanzas de la Universidad Javeriana.
Justamente en Nu Colombia recomiendan aprender sobre opciones de inversión y diversificación de cartera. Se debe considerar la posibilidad de invertir en acciones, bonos, fondos indexados o bienes raíces, teniendo en cuenta las preferencias e intereses de cada persona.
La constancia
Dos aliadas incondicionales en este campo son la disciplina y la constancia. La libertad financiera no se alcanza de un día para otro, hay que pensar en el largo plazo. “No se logra en uno, dos o tres años. Se debe pensar a largo plazo, como mínimo cinco años, y por eso hay que ser constante”, advierte Andrés Moreno.
La gerente de Responsabilidad Corporativa y Educación Financiera de BBVA señala que “hay que seguir con el proceso hasta llegar al punto en el que lo que genera su capital es suficiente como para cubrir sus gastos de vida, teniendo siempre presente la inflación”.
Paciencia, aliada hacia la libertad
Si usted no tuvo la suerte de nacer en una familia de cuna noble, o mejor, en una familia acomodada que le pueda heredar riqueza, empiece desde joven, desde su primer empleo, a construir el camino para lograr la independencia financiera.
“Es mejor empezar joven, guardando siempre un poquito de lo que se gana. De esta forma, se empieza guardando de a poco, así hay mucho tiempo para alcanzar la meta”, explicó Juan Camilo Rivera, director de la carrera de Finanzas de la Universidad Javeriana.
Y si ya es más grande y se le hizo tarde, no importa, puede empezar a trabajar aunque la pendiente será más empinada.
En cualquier caso, los expertos aconsejan tener como aliada a la paciencia. Esto no se logra de la noche a la mañana. Y, como ya se mencionó antes, debe ir acompañada de constancia. “Hacer lo mismo cada mes, cada año. Es un paso a paso que te llevará a donde quieres”, dijo Rivera.
Para Édgar Ricardo Jiménez, especialista en finanzas y profesor de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, es indispensable el deseo, el querer trazarse ese camino. “Hacerlo porque ha sido su interés, porque es una opción de vida. No hay que hacerlo porque toca, pues fracasará en el intento. Y cuando es su deseo y le apostó a eso, hay que prepararse, educarse. Hoy, en un mundo hiperconectado, hay muchas opciones de información, de autoaprendizaje responsable, consultando en sitios especializados y fiables sobre el tema”, señaló.
Los expertos señalan que hay que tomar decisiones acertadas e inteligentes. Esa será la clave para resolver cualquier problema que se presente en el ámbito monetario.