Doce años después de que en un informe dirigido al Consejo Mundial del Medio Ambiente y Desarrollo de Naciones Unidas se acuñara por primera vez el término desarrollo sostenible, ocurrieron dos hechos que marcaron la inserción del sector productivo en este modelo que hoy es tendencia en los cinco continentes.
En 1999 nació el Pacto Global en el que participan empresas que insertaron en sus estrategias y operación principios sobre derechos humanos, normas laborales, medioambiente y rechazo a la corrupción, e inició la elaboración del Índice de Sostenibilidad de Dow Jones, considerado el monitor empresarial más importante en este campo.
Según Raúl Ávila, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia, este listado escoge a las 320 compañías socialmente más responsables del mundo a partir de analizar 600 variables sobre tres factores: ambiental, social y de gobernanza.
“En el proceso de evaluación de sostenibilidad corporativa se ayuda a detectar a aquellas compañías que están mejor posicionadas para abordar futuros desafíos y oportunidades impulsados por la sostenibilidad. La evaluación produce aproximadamente 1.000 puntos de datos por empresa y es la base para la determinación de la inclusión en los DJSI”, explica.
Cuenta el académico que el cumplimiento de los parámetros es responsabilidad del Comité de Standard & Poor’s del Índice Dow Jones y RobecoSAM, uno de los grupos de inversión más grandes del planeta.
En la edición 2020 se incluyeron cinco compañías colombianas: Grupo Argos, Cementos Argos, Bancolombia, Grupo Nutresa y Grupo Sura. Otras dos se añadieron en el Índice de Mercados Emergentes: Davivienda e ISA.
Según Sergio Rengifo Caicedo, director ejecutivo del Consejo Empresarial Colombiano por el Desarrollo Sostenible (Cecodes), estas empresas “han trabajado durante años en el mejoramiento y fortalecimiento de sus procesos en los tres ámbitos”.
Plantea que para ser tenidas en cuenta, en estas debe haber “un compromiso específico por parte del liderazgo para que este sea el motor de movimiento de recursos que permitan el logro de objetivos ambiciosos que cada compañía se propone”.
María Mercedes Barrera, gerente de Responsabilidad Corporativa del Grupo Sura, compañía que cumplió 10 años de manera ininterrumpida en el Índice, plantea que el camino a seguir es “no perseguir una distinción por obtener un lugar en un ranking, sino permitirse transitar estos procesos de aprendizaje y reflexión para encontrar el rol que como empresa se tiene en la sociedad”.
Por su parte, Camilo Abello, director senior de Sosteniblidad, enfatiza en el bienestar social porque en “momentos como el que estamos atravesando nos muestran que tenemos la necesidad de liderar con el ejemplo para seguir promoviendo la transformación social y desarrollo de nuestro país, avanzando en nuestra forma de hacer negocios y poniendo la sostenibilidad como el centro de nuestra gestión”.
Finalmente, María Eugenia Rinaudo, coordinadora de Sostenibilidad de la Universidad EAN, concluye afirmando que el éxito en este proceso se basa en que “la sostenibilidad no es una imposición, sino que debe estar dentro del ADN de cada organización”.