Las criptomonedas son una realidad innegable que necesita cuanto antes que los países empiecen a trabajar en su regulación. Esta fue la principal conclusión del debate de este miércoles 25 de mayo que se realizó en el marco de la reunión anual del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza.
De acuerdo con las impresiones registradas por el WEF (por sus siglas en inglés) en un documento titulado “Crypto Cash”, expertos aseguran que la situación actual de criptodivisas como el bitcoin, ether, terra o luna; son la prueba de que es necesario intervenir cuanto antes para evitar que la especulación afecte a la economía de las naciones.
El Foro de Davos advierte que por más seguro que sea el algoritmo con el que trabajan las criptomonedas, este se mueve en el mundo de lo intangible, haciendo alusión a la falta de unas reservas de riqueza que respalden todo el dinero que a diario se intercambia en este mercado digital. Así mismo resalta que “la criptografía llegó para quedarse y la creación de regulaciones inclusivas hará que el sistema sea más ágil, eficiente y resistente”.
“El motor de la economía mundial se esfuma mientras intenta avanzar bajo una pesada carga: una guerra en Ucrania, una interrupción masiva de la cadena de suministro, dudas sobre la seguridad alimentaria, una pandemia mundial que aún tiene graves consecuencias y la inflación más alta en 40 años”, dice este documento.
Las opiniones que consigna este texto recordaron lo sucedido recientemente con divisas digitales como el bitcoin (la más famosa), la cual recientemente cayó a su precio más bajo desde que fue fundada en 2009, y señaló que pese a que lleva mucho tiempo en circulación, aún la gente está aprendiendo cómo funciona, resaltando que “ha habido otros tres ciclos de mercado ‘a la baja’, en 2011, 2013 y 2017, y podríamos estar en otro”.
“Los mercados financieros están tratando de procesar un endurecimiento de la política monetaria por parte de la Reserva Federal para frenar la creciente amenaza de inflación. Estamos viendo el impacto en el mercado de valores y los precios de las criptomonedas. También sabemos que algunos cripto-activos se han correlacionado más con tendencias de mercado más amplias”, explicó el WEF.
Ante toda esta situación, el Foro Económico Mundial sostiene que es necesario avanzar hacia el concepto de una “stablecoin”, haciendo referencia a una criptomoneda más estable y con regulaciones que protejan los derechos y capitales de las personas que invierten allí, ya que una descompensación de este mercado podría traer serias consecuencias para la economía mundial.
“La idea detrás de las monedas estables es combinar las capacidades técnicas de los activos digitales, al tiempo que brinda una alternativa a la volatilidad de los precios, que históricamente ha sido característica de las principales criptomonedas como bitcoin y ethereum”, agrega el documento del Foro.
Para que esto sea posible, el Foro Económico Mundial sostiene que es necesario que exista un respaldo real para las criptomonedas, ya sea con reservas 1 a 1 de monedas fiduciarias, con materias primas como metales preciosos, petróleo o bienes raíces u otras criptodivisas por medio de “contratos inteligentes”.
“Estas monedas estables no están respaldadas. En cambio, su objetivo es mantener un valor estable a través de algoritmos y contratos inteligentes que gestionen la expansión y contracción del suministro de tokens (...) las cripto están aquí para quedarse y necesitan regulación”, dijo el WEF.
Por último, este documento hace referencia a la necesidad de que los países empiecen a legislar frente a este tema, con el fin de delimitar la forma en la que deberán operar, las condiciones con las que llegarán a la gente y los respaldos que darán al mercado de inversiones, así operen en el mundo digital.
“Cada vez que estalla la burbuja publicitaria, los especuladores salen y dejan a los usuarios reales y constructores de la tecnología para hacer que el sistema sea más ágil, eficiente y resistente (...) De cara al futuro, las herramientas financieras deberían ser más accesibles, transparentes y eficientes. Deben aprovechar las nuevas oportunidades de la innovación”, concluyó el Foro Económico Mundial.