La relación comercial con Venezuela que estuvo suspendida por años y ahora se retoma tiene una gran importancia para la reactivación de la economía colombiana y, en especial, para el comercio exterior, que requiere equilibrar la balanza entre lo que compra el país a otras naciones y lo que logra vender.
La puesta en operación del transporte internacional de carga, con el cual se busca además fortalecer las relaciones binacionales, mostró sus primeros resultados.
Durante el primer día (el 11 de enero), hacia las 3 de la tarde ya habían pasado tres tractocamiones colombianos por el puente internacional Atanasio Girardot, con lo cual, se dio inicio oficial al transporte de carga por esta infraestructura binacional.
Las cifras evidencian lo clave que es el vecino país para el comercio exterior de Colombia, tanto por la cercanía geográfica, como por las necesidades de consumo que hay en esa nación.
Es así como, en tan solo los tres primeros vehículos de carga que pasaron por el recién inaugurado puente Atanasio Girardot (antes, conocido como Tienditas) hacia Venezuela se transportaron 96 toneladas de preparaciones alimenticias como refrescos, alimentos y pasabocas, según información del Ministerio de Comercio.
Lo que evidencian los números
El puente, que anteriormente era conocido como Tienditas, en la primera semana de este año ha registrado el ingreso al país de 42.917 vehículos, 10.066 motocicletas y 140.947 personas. Es decir, la reactivación se está dando de ambos lados.
En cuanto a salidas la cifra es similar. 41.350 vehículos, 9.343 motocicletas y 135.195 personas, de acuerdo con datos suministrados por Migración Colombia.
Germán Umaña Mendoza, ministro de Comercio, señaló que el inicio de la operación de carga por esa infraestructura se convierte en un “hito” y el puente será protagonista para el objetivo del comercio, pues con el paso de mercancías “se abren nuevas oportunidades para la complementación comercial de nuestros países”.
Agregó que el gobierno viene trabajando de forma coordinada a través de los ministerios de Comercio; Transporte y Relaciones Exteriores y sus entidades, con sus homólogos de Venezuela, para hacer realidad el comercio y las relaciones entre las dos naciones.
Guillermo Francisco Reyes González, ministro de Transporte, sentó su posición sobre el hecho: “es satisfactorio ver que esta infraestructura regional funciona bien y apoya el pleno restablecimiento de las relaciones políticas, sociales, diplomáticas y comerciales”.
Adicionalmente, Reyes destacó además que “con esto, se apoya la Justicia Económica y la Justicia Social gracias a la formalización de las actividades comerciales. Las cifras de personas, vehículos y carga son crecientes y dejan ver un futuro promisorio para la frontera de los dos países hermanos”.
Entre tanto, el director general de Migración Colombia, Fernando García Manosalva, se refirió al tema y dijo que “la normalización paulatina del flujo migratorio en el puente Atanasio Girardot representa un avance en nuestra política de construir una migración humana”.
Con todos los juguetes
Alrededor del nuevo puente ya existe toda la logística necesaria para el comercio exterior. Por ejemplo, hay un edificio en el que operan entidades como la Dian, el ICA, el Invima y Migración Colombia. Además, están presentes entidades y funcionarios de los ministerios de Transporte y Relaciones Exteriores y Comercio, Industria y Turismo, con el propósito de facilitar tanto los procesos de migración como los de transporte internacional de mercancías, según dijeron los voceros colombianos.
Con el Atanasio Girardot ya quedan habilitados todos los puentes internacionales con Venezuela para realizar los procesos de importación y exportación con los cuales se espera que Colombia tenga resultados en su balanza comercial.