El dólar no comienza muy bien la jornada de este viernes, 6 de mayo, en la que registra pérdidas durante sus primeras horas, incluso por debajo de la cotización de cierre del pasado jueves.
De esta forma, se frena una semana completa en la que esta divisa inició siempre al alza, en medio de un mercado en el que ha ganado más de 200 pesos, impulsado principalmente por la crisis en Ucrania, los precios del petróleo y la volatilidad de los precios del petróleo.
Según la Bolsa de Valores de Colombia (BVC), el dólar comenzó el día con un valor de 4.080 pesos y en algo más de una hora cayó más de 15, hasta los 4.063, con un máximo de apenas 4.085. Entre tanto, el precio promedio es de 4.069 pesos con 48 centavos.
Al parecer, el dato de inflación revelado por el Dane durante la noche del jueves 5 de mayo, que alcanzó el punto más alto en 20 años, disparado principalmente por los servicios públicos, le está pasando factura al movimiento de esta divisa en el mercado colombiano.
A los colombianos les está costando más el corrientazo, los arriendos, la electricidad, entre otros. La inflación en el país, en los últimos doce meses ―hasta abril―, tuvo un incremento de 9,23 %, la más alta en los últimos 21 años (no se tenía en esos niveles desde julio de 2020, cuando fue de 9,29 %), según el director de la entidad, Juan Daniel Oviedo.
El dato anualizado de abril equivale a 7,28 puntos porcentuales, por encima de lo que reportaba el Dane en el mismo periodo del año anterior, cuando la inflación fue de 1,95 %.
¿Por qué los precios del oro y la plata se podrían disparar?
La volatilidad parece no dar tregua en los mercados. El dólar sube y baja sin poder estabilizarse, la inflación crece a ritmos impactantes y el encarecimiento del costo de vida golpea casi todos los sectores de la economía.
Con este panorama, los analistas y expertos han comenzado a ponerles la lupa al oro y la plata. Según Ned Naylor-Leyland, analista responsable del área de oro y plata en Jupiter Asset Management, el posible escenario podría verse reflejado en los precios y los coletazos que recibirían la plata y las empresas que están encargadas de la explotación minera.
El oro ajustado por la inflación ha rondado su nivel actual cuatro veces desde 1971. Más recientemente, hace dos años, el precio nominal se aproximó a los 2.100 dólares por onza y ahora se sitúa en algo menos de 2.000 dólares por onza.
Según lo explica Naylor-Leyland, el panorama no pinta bien. Es probable que se produzca una disparada en el precio del oro, ya que este metal precioso va en contravía de los tipos de interés reales, que son los que se pagan al descontar la inflación.
Como afirma el experto, el oro despierta un interés porque crece la preocupación por el poder adquisitivo a futuro. Por ahora, afirma, el mercado sigue cuestionándose si la Reserva Federal de Estados Unidos podría llegar a subir los tipos de interés hasta siete veces este año y si es posible que la inflación comience a flaquear, debilitándose sustancialmente.
“En mi opinión, esa es la razón por la que todavía el oro no ha experimentado una verdadera ruptura: porque el endurecimiento de la política monetaria sigue dominando el ánimo del mercado. El detonante para el oro puede ser que la inflación suba por encima de las previsiones o que el mercado acepte que siete subidas de tipos en Estados Unidos son demasiadas. Eso daría lugar a una ruptura en el precio del oro”, insistió el experto.