La bolsa de Nueva York terminó al alza por compras a buen precio tras una jornada negra el martes, que erosionó varias cotizaciones y devolvió a sus principales indicadores a registros que no se veían desde hace más de dos años; afectados por los datos sobre el aumento del costo de vida revelados en Estados Unidos.
En una jornada que se orientó al alza tras un indicador de inflación mayorista que mostró una ligera baja de precios en agosto en Estados Unidos, el Dow Jones ganó 0,10 %, el tecnológico Nasdaq 0,74 % y el S&P 500 0,34 %.
Por otra parte, al revisar otros mercados en el mundo, tres de las principales bolsas europeas, París, Fráncfort y Londres, no se recuperaron del choque causado la víspera por las cifras de la inflación en Estados Unidos, y cerraron a la baja.
Al cierre de las operaciones en el viejo continente, París perdió 0,37 %, Fráncfort 1,22 % y Londres 1,47 %. Sin embargo, Madrid subió 0,01 % y Milán ganó 0,49 %. Aún no regresa la confianza entre los inversionistas y se mantiene el halo de incertidumbre frente a lo que podría pasar en el futuro con la posibilidad de una recesión económica.
¿Por qué el giro repentino?
Los precios mayoristas se moderaron en agosto en Estados Unidos gracias a la gasolina más barata, un descenso en línea con lo esperado por los analistas pero que muestra a algunos sectores con alzas todavía importantes.
El índice de precios al productor (PPI) cedió por segundo mes consecutivo en agosto, apenas 0,1 % con relación a julio, según los datos publicados el miércoles por el Departamento de Trabajo.
Los consumidores pudieron ver un descenso del precio de la gasolina, pero fue la caída de 6 % de los precios mayoristas de la energía en agosto la clave para que se moderara el alza del índice PPI en casi un punto porcentual, a 8,7 % en 12 meses. En julio, a 12 meses, la suba de precios mayoristas anotó 9,8 % en tanto en junio marcaba 11,3 %.
“Aunque se trata de un paso en la dirección correcta, los costos de producción continúan aumentando rápidamente, muy por encima del objetivo” general de inflación a largo plazo de la Reserva Federal (2 %), señaló Rubeela Farooqi, de HFE.
El índice PPI es una medida de la inflación que toma en cuenta los precios desde la perspectiva de fabricantes y vendedores.
Desde el lado de los consumidores, la inflación se moderó menos de lo esperado por el mercado en agosto en Estados Unidos, a 8,3 % en 12 meses también gracias a la caída de los precios de la gasolina, pero los alquileres y alimentación siguieron subiendo. Los precios al consumo aumentaron 8,3 % en 12 meses a agosto frente a 8,5 % en julio y 9,1 % en junio, según el índice CPI publicado el martes por el Departamento de Trabajo.
Esta ligera moderación decepcionó a los analistas que esperaban una caída a 8 % y golpeó a los mercados. Wall Street cerró en fuerte baja ante el pánico que desató el índice CPI a pocos días de una reunión clave de política monetaria de la Reserva Federal (FED), que viene subiendo sus tasas de interés para enfriar la economía.
Por último, los precios del petróleo repuntaron el miércoles impulsados por el levantamiento de restricciones sanitarias en China y la perspectiva de que acabe el uso de reservas estratégicas de crudo en Estados Unidos.
El precio del barril de Brent del mar del Norte para entrega en noviembre ganó en Londres 0,99 % para cerrar en 94,10 dólares. En Nueva York, en tanto, el West Texas Intermediate (WTI) para entrega en octubre ganó 1,34 % a 88,48 dólares.
Tras la baja del martes por un indicador de inflación en Estados Unidos mayor a lo esperado, los operadores reaccionaron al anuncio del levantamiento a partir del jueves de los confinamientos en Chengdu, una de las mayores ciudades chinas con 21 millones de habitantes.
*Con información de AFP.