La bolsa de Nueva York terminó a la baja este martes por un movimiento de aversión al riesgo debido a múltiples factores negativos sobre la coyuntura económica mundial, desde altas tasas de interés hasta precios elevados del petróleo.

El índice Dow Jones perdió 1,14%, el tecnológico Nasdaq 1,57% y el S&P 500 1,47%.

Vale la pena recordar que la confianza de los consumidores estadounidenses en la economía volvió a caer fuertemente en septiembre, debido a las expectativas de inflación y de aumento de las tasas de interés en los próximos meses, según datos publicados el martes por el instituto Conference Board.

El índice que mide la confianza de los estadounidenses en el futuro de su economía cayó a 103,3 puntos, indicó el organismo empresarial, frente a 108,7 puntos en agosto, datos que fueron revisados al alza.

El índice que mide la confianza de los estadounidenses en el futuro de su economía cayó a 103,3 puntos. | Foto: Hiroshi Watanabe

El mercado esperaba una caída, pero de menor magnitud, a 105 puntos, según el consenso reunido por el sitio especializado Briefing.com.

“Los consumidores están preocupados por el alza de precios en general, y en particular por los alimentos y la gasolina. También expresaron inquietud sobre la situación política y el incremento de las tasas de interés”, detalló Dana Peterson, economista jefe del Conference Board, citada en un comunicado.

“Los consumidores escuchan tal vez peores noticias sobre las ganancias de las empresas, mientras que las ofertas de empleo se reducen y las tasas de interés siguen en aumento”, sostuvo Peterson.

La Reserva Federal, el banco central estadounidense, mantuvo sus tasas estables en su última reunión de política monetaria, pero prevé un alza más este año y espera tipos de interés altos en 2024, por encima de lo que esperaba previamente.

Los precios del petróleo frenaron la caída de la inflación en Estados Unidos, ubicada en agosto en 3,7% en la medición por precios al consumo (IPC). El índice PCE, el más seguido por la Fed, será publicado el 29 de setiembre.

De igual manera, las ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos cayeron fuertemente en agosto, tras un repunte en julio, según datos publicados el martes por el Departamento de Comercio, en un contexto de tasas de interés elevadas.

Las ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos cayeron fuertemente en agosto, tras un repunte en julio. | Foto: 2012 Getty Images

En agosto, 675.000 propiedades nuevas se vendieron en proyección anual (la estimación a 12 meses si se mantuvieran las condiciones del mercado al momento de la medición).

Se trata de un descenso de 8,7% con respecto a julio, cuando la cifra fue revisada al alza (739.000 en lugar de 714.000).

La caída es superior a lo esperado por los analistas, que proyectaban una cifra de 695.000 ventas, según el consenso de briefing.com. Comparado con agosto de 2022, el dato es 5,8% superior.

La mediana de precios (la mitad de las casas se ubica por debajo de este precio y la otra mitad por encima) se ubicó en 430.000 dólares frente a 436.000 en julio; pero el precio promedio de una vivienda nueva aumentó, a 514.000 contra 507.900 dólares.

“Las tasas de créditos hipotecarios altas, por encima de 7%, siguen erosionando la confianza de los constructores”, destacó el 18 de setiembre la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas (NAHB), en su índice mensual realizado junto a Wells Fargo Housing.

Los inicios de obra cayeron en agosto a su nivel más bajo desde mayo de 2020.

“Las tasas de interés más altas (…) son un obstáculo para los compradores. Pero la disponibilidad limitada de viviendas usadas desplazó la demanda a la vivienda nueva”, resumió Rubeela Farooqi, economista jefe de HFE, en una nota de análisis.

Los créditos hipotecarios incluyen las tasas más altas en 21 años en Estados Unidos, de 7,19% para el crédito a tasa fija a 30 años, que es el más común, según datos del grupo de refinanciamiento hipotecario Freddie Mac.

Los créditos hipotecarios incluyen las tasas más altas en 21 años en Estados Unidos, de 7,19% para el crédito a tasa fija a 30 años que es el más común, según datos del grupo de refinanciamiento hipotecario Freddie Mac. | Foto: Getty Images

*Con información de AFP