La Bolsa de Nueva York terminó a la baja este miércoles en un contexto de aumento de las tasas de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a un máximo desde 2007, en medio de preocupaciones por el conflicto en Oriente Medio.
El índice Dow Jones perdió 0,98 %, el tecnológico Nasdaq 1,62 % y el S&P 500 1,34 % en la campana de cierre.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años alcanzó un nuevo máximo en 16 años, de 4,92 %, durante la sesión del miércoles.
Las tasas de créditos hipotecarios también alcanzaron un máximo, en este caso en 23 años, en 8 % para los préstamos a tasa fija a 30 años, los más comunes en Estados Unidos.
La onza de oro –un valor refugio– subió 1,36 % a 1.962,10 dólares, un máximo en más de dos meses.
El mercado petrolero, por su parte, también registró alzas de precios del barril de crudo ante las amenazas iraníes de embargo sobre Israel.
“Es difícil tener clara la razón de la caída de las acciones, entre la influencia de los acontecimientos en Oriente Medio y la subida de las tasas de interés”, un fenómeno que erosiona las ganancias futuras de las empresas, indicó Karl Haeling, de LBBW, a la AFP.
“Hay ciertamente temor” de que la guerra entre Israel y Hamás “se vuelva un conflicto regional”, añadió Tom Cahill, de Ventura Wealth Management.
Pero Cahill considera que para el mercado “el gran problema es la subida de las tasas de interés”, provocada en buena medida por los buenos indicadores macroeconómicos en Estados Unidos, que hacen pensar que la Reserva Federal dejará “las tasas altas por más tiempo”.
El analista se refiere particularmente a las ventas minoristas que sorprendieron a los inversores por su vigor en setiembre (+0,7 %).
Este miércoles, el Libro Beige de la Fed describió una economía que pierde algo de fuelle y un mercado laboral que cede, pero se trata de una encuesta que abarca seis semanas hasta el 6 de octubre.
Entre los resultados esperados tras el cierre, Netflix anunció una subida de 10 % del número de abonados en el tercer trimestre, mientras que la ganancia neta trimestral superó las expectativas.
La plataforma de streaming creció en 8,76 millones de abonados a 247 millones a finales de septiembre. Su ganancia neta subió 20 % con respecto al tercer trimestre del año pasado, a 1.600 millones de dólares para una facturación en alza de 8 % a 8.540 millones de dólares.
Su acción se disparaba 12 % en los intercambios electrónicos fuera de hora.
En cambio, el fabricante estadounidense de vehículos Tesla presentó resultados para el tercer trimestre por debajo de lo esperado por el mercado, debido a costos de producción mayores en sus nuevas usinas que en las anteriores fábricas.
El grupo, que procedió a importantes rebajas de precios de sus productos en los últimos meses, facturó 23.350 millones de dólares entre julio y septiembre (+9 %) y obtuvo una ganancia neta por acción de 66 centavos.
El mercado esperaba 24.190 millones de dólares y 73 centavos.
Sus acciones cayeon 4,78 % el miércoles a 242,68 dólares, y subían 0,50 % tras el cierre.
Vale la pena recordar que el banco estadounidense Morgan Stanley anunció el miércoles un beneficio neto en el tercer trimestre superior a lo esperado por los analistas, basado en la buena facturación de comisiones en la gestión de activos, así como en inversiones diversificadas en valores.
“Si bien el entorno del mercado se mantuvo heterogéneo durante el trimestre, el grupo logró resultados sólidos”, comentó James Morgan, director del banco, citado en un comunicado de prensa.
“Nuestros negocios de inversión en acciones y renta fija navegaron bien en los mercados y la gestión de patrimonios y activos generó mayores ingresos y ganancias año tras año”, exaltó.
Entre julio y septiembre pasados, Morgan Stanley obtuvo unos ingresos de 13.270 millones de dólares, un alza de 2 % en un año.
Su beneficio neto se situó en 2.260 millones de dólares, una caída del 9 % en la comparación anual, pero un alza del 10 % en comparación con el trimestre anterior.
Por acción y excluyendo artículos excepcionales, elemento de referencia para los mercados, quedó en 1,38 dólares, frente a 1,47 del año anterior. Los analistas esperaban un promedio de 1,31 dólares.