No podía ser distinto el resultado. 2020 fue prácticamente un año perdido para las ciudades colombianas, lo que ahora se refleja en una reducción de su competitividad.
Quince capitales, de las 32 que entraron en la medición, disminuyeron su desempeño competitivo. Esto es casi la mitad de las ciudades, entre las cuales, Bogotá lidera el índice, con una calificación de 7,79 sobre 10, aunque presenta una reducción marginal de 0,4 puntos respecto a 2020, señala el informe.
Dentro de las grandes ciudades que, sin embargo, también se vieron visiblemente afectadas por la crisis, se ubica el Área Metropolitana de Medellín. También dentro de las cinco primeras posiciones está Tunja; el Área Metropolitana de Cali y el Área Metropolitana de Bucaramanga.
Por el contrario, hay que destacar las reducciones, en dos posiciones, de San Andrés y Mitú.
El informe fue presentado por el Consejo Privado de Competitividad (CPC) y la Universidad del Rosario.
Novedades
El Índice fue presentado con la salvedad de que no podrá ser comparado con índices anteriores. Contiene 104 variables, de las cuales, el 100% son datos duros, es decir, no obedecen a percepciones sino a realidades estadísticas.
Las 32 capitales incluyen 25 ciudades y 7 áreas metropolitanas. Otro elemento clave del informe es que, por primera vez parte de los datos del Censo de Población 2018, realizado por el Dane, lo que le agrega novedades a los resultados, pues el tema de la población afecta al 36% de las variables.
Partiendo de ese contexto, hay que señalar que, las ciudades avanzan en unos temas y otros retroceden de manera preocupante. Por ejemplo, Medellín está inscrita dentro de las ciudades que tienen alta vulnerabilidad con el tópico del empleo, aunque hay que enfatizar que en el país, el mercado laboral en general es precario, debido a la informalidad.
Otro avance para destacar es el de Montería, que subió 4 posiciones en temas de tecnología y comunicaciones (TIC).
Bogotá, además de estar a la cabeza en el índice, en general, muestra una mejora en pruebas saber y avance de más población dominando un segundo idioma.
Se amplían las distancias entre una ciudad y otra
Desde el nivel central es clave poner la lupa en el desarrollo territorial que, a la larga, es el que genera competitividad, lo que a su vez recae sobre el bienestar de la gente: una ciudad competitiva avanza, genera más empleo y más infraestructura para que las personas vivan mejor.
Por esa razón, hay que tener en el visor uno de los hallazgos del informe, según el cual, se ahondaron las distancias en competitividad entre una ciudad y otra. “La diferencia en puntaje, entre la ciudad con el mejor y el peor desempeño aumentó en ocho de los trece pilares evaluados”, dice el informe.
El informe fue presentado en medio de un foro, liderado por Ana Fernanda Maiguashca, nueva presidente del Consejo Privado de Competitividad.
Las que mejoraron y empeoraron
Dentro de las ciudades que incrementaron sus posiciones en relación con el índice anterior, se destacan, Ibagué, que subió dos posiciones, al igual que Sincelejo. Entre tanto, Yopal avanzó una posición, lo mismo que Puerto Carreño, Inírida y Arauca (+1).
En contraste, Cartagena, Pasto, Valledupar y Mocoa perdieron 1 posición.