El precio de la gasolina es un tema que si bien está pasando de agache por parte de muchas autoridades y analistas en el país, sin duda sigue apretando el bolsillo de los colombianos que en los últimos dos meses ya vieron cómo se encareció 400 pesos y todavía les falta un aumento más que se aplicará para el mes de diciembre, según lo estipulado en su momento por el Gobierno Nacional, con miras a tapar el hueco fiscal que hay en el Fondo de Estabilización de Precios.
A finales del mes de septiembre, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, anunció que el costo al consumidor de la gasolina subiría 200 pesos mensuales hasta diciembre, para llegar a un total de 600 pesos más por cada galón de este combustible.
Así las cosas, ya se aplicaron los aumentos de octubre y noviembre y desde esta semana se ajustará nuevamente para completar los incrementos que estaban estipulados. Los máximos históricos que alcanzó el petróleo en marzo también influyeron para que esto pasara.
En esto hay que destacar que, con miras a evitar un impacto directo por las alzas en la cadena logística, el Ministerio de Hacienda informó en su momento que se mantendrían congelados los precios del ACPM, teniendo en cuenta que este es el insumo principal de los transportadores y cualquier cambio en sus costos de operación se traduciría en un alza directa en los precios finales al consumidor, haciendo que suba más el costo de vida.
Recientemente, el ministro Ocampo indicó que esperan que con todas estas medidas se pueda mejorar el panorama de los precios de los combustibles a futuro, teniendo en cuenta que la volatilidad internacional del petróleo ha sido un factor fundamental para que todo esto ocurra.
“Para equilibrar la carga fiscal derivada del FEPC y las presiones inflacionarias que podría generar el aumento de los precios de los combustibles, el gobierno ha implementado aumentos graduales en los precios de la gasolina y el ACPM, lo que evitará aumentos drásticos en la inflación. Asimismo, se ha priorizado la estabilización del precio del ACPM, teniendo en cuenta su impacto potencial sobre los costos de transporte de mercancías”, explicó este funcionario.
Por último, frente a nuevos aumentos de este combustible, fuentes del Ministerio de Hacienda confirmaron a Semana que todavía no hay una decisión tomada y que este es un tema que todavía están analizando, puesto que el valor del petróleo se corrigió y por ahora no quieren meterle más presión al bolsillo de la gente.
¿Gasolina a 10 mil pesos el galón?
De acuerdo con las cifras entregadas por el Ministerio de Minas y Energía, luego de las alzas de noviembre, Villavicencio es actualmente la ciudad con la gasolina más cara en el país, con un precio al consumidor de 10.023 pesos por galón, siendo esta la única por ahora que se ubica por encima de la barrera de los 10 mil pesos.
En el segundo lugar aparece Cali, con 9.962 pesos, seguida por Manizales con $9.916, Bogotá con 9.923 pesos por galón y Pereira en el quinto lugar con $9.906 pesos. Estas son las únicas cuyo precio al consumidor está por encima de los 9.900 y para el mes entrante llegarían a los 10 mil pesos, situación que sin duda será un duro golpe al bolsillo de los colombianos.
En la otra cara de la moneda, con la gasolina más barata del país, aparece Cúcuta en primer lugar con un precio final al consumidor de 7.976 pesos. Luego está Pasto con 8.413 pesos, ciudad donde el aumento del combustible no fue de 200, sino de 191 pesos solamente.
Ahora bien, luego de que se apliquen las alzas del mes de diciembre, todas las ciudades que hoy en día están en la barrera de los 9.900 pesos, pasarían a tener que pagar 10 mil 100 pesos por un galón de gasolina, entre estas destacan nombres como Manizales, Cali, Bogotá y Pereira.
Sin embargo, no hay que olvidar que, según Fendipetróleo, actualmente hay en el país casos especiales como el departamento de Vaupés, donde este combustible cuesta actualmente 17.800 pesos por galón y el próximo mes pasaría a costar 18 mil. Lo mismo pasa con Guainía que pasaría a tener que pagar de 12.400 a 12.600 pesos por cada galón de gasolina que sus habitantes deseen comprar.