En septiembre, el costo de vida en el país aumentó 0,38 %. Esto implica un aumento del 4,33 % en lo corrido del año y del 4,51 % en los últimos 12 meses. Esta cifra supera la expectativa del mercado, que esperaba una inflación del 0,36 % en el mes, así como el dato promedio de los septiembres registrado entre 2016 y 2020, que fue del 0,14 %. Así mismo, es un dato que ratifica la tendencia alcista de precios de este año y se ubica por encima de la meta del 3 % establecida por el Banco de la República.

En el noveno mes del año, el grupo de gastos que más impulsó el nivel de precios en el país fue el de arrendamientos y pago de servicios públicos. Por el contrario, el rubro de educación es el que más ayudó a que no subiera tanto la canasta familiar. En este caso, Juan Daniel Oviedo, director del DANE, explicó que el menor aumento de precios se debe al programa de gratuidad para educación superior en los estratos 1, 2 y 3.

Juan Daniel Oviedo, director del DANE. | Foto: Juan Carlos Sierra

En el año corrido (enero a septiembre), así como en los últimos doce meses, los que más hicieron que subieran los precios fueron los alimentos, mientras que los gastos en información y comunicación (que incluye ítems como el costo de los celulares) son los que menos suben. En alimentos, los rubros que más han impulsado el alza de la canasta familiar son carne de res, plátanos y frutas como mango y aguacate.

Por ciudades, Cúcuta registró el mayor incremento del costo de vida en septiembre con 0,79 %, seguida de Santa Marta con 0,76 %. Por el contrario, Ibagué y Popayán registraron una tasa de inflación negativa en el mes de -0,04 %.

Bogotá quedó por debajo de la media nacional con una inflación del 0,29 % en septiembre, en especial porque tiene la mayor cantidad de estudiantes universitarios beneficiados con el programa de gratuidad de matrícula cero. Además, la capital del país se ubica como la ciudad con menor avance de la inflación en lo corrido del año, con 3,59 %.

En el análisis por estratos sociales, esta vez la mayor inflación la sienten los hogares de altos ingresos, con 0,40 por ciento mensual. Según Oviedo, esto se explica porque los productos alimenticios que más están subiendo de precio son los que consume mayormente este grupo, en particular la carne de res, mientras que el arroz y los huevos han bajado de precios y eso beneficia a las clases de estratos socioeconómicos bajos, que son los que experimentaron la menor alza en su costo de vida, con un registro de 0,36 por ciento anual. Para la clase media, la inflación fue de 0,37 por ciento y para la clase denominada vulnerable fue de 0,41 por ciento.

Impacto en tasas

En la medida en que la inflación se mantenga al alza, esto motivaría al Banco de la República a continuar subiendo sus tasas de interés. La semana pasada hizo la primera alza en cinco años para pasarlas de 1,75 a 2 %. Uno de los principales objetivos del Banco es controlar el nivel de precios, así como sus expectativas. Con los datos recientes, la entidad prevé una tasa de inflación al cierre de 2021 del 4,5 % y del 3,5 % en 2022.

Así mismo, vale la pena recordar que hoy la inflación no es solo un problema de Colombia, sino que es global. Juan Carlos Martínez Lázaro, profesor del IE Business School, dice que tras la importante contracción de precios que se registró el año pasado como consecuencia de los confinamientos, este indicador se ha convertido actualmente en uno de los principales frenos para la reactivación económica. En Estados Unidos y Europa, al igual que en Colombia, supera la meta establecida por sus bancos centrales