El incremento en los precios de algunos productos y servicios en Colombia parecen no tener freno y cada vez más las familias sienten una mayor presión para hacer que el dinero alcance para hacer el mercado y cubrir los gastos diarios.
En agosto, la inflación anual en el país marcó un nuevo máximo histórico en 23 años, al llegar a 10,84 %, la cifra más alta desde abril de 1999 y la segunda de doble dígito en lo que va del 2022, después del dato de julio (10,21 %). En términos mensuales, la inflación fue de 1,02 %, cuando en el mismo mes de 2021 era de solo 0,45 %.
Esta disparada en el costo de vida en el país estuvo impulsada, especialmente, por los altos precios de los alimentos, que tuvieron un aumento mensual de 1,85 %, mientras que la variación anual fue de 25,57 %.
“Esto sigue siendo muy preocupante, especialmente, porque buena parte de la canasta básica de la población de ingresos bajos viene por cuenta del consumo de alimentos, eso lo que quiere decir es que todavía falta bastante para que la inflación toque techo y seguramente vamos a estar hablando de inflaciones de más de 11 % a noviembre de este año”, aseguró Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria.
Si se pone la lupa en el grupo de alimentos, los productos que están disparados en su precio, en términos anuales, son el arroz, el pan, el trigo y el maíz. Estos dos últimos productos se importan en Colombia y sus elevados precios se deben a la guerra en Ucrania, que ha dificultado el suministro a nivel mundial.
También registran incrementos importantes los precios de la carne de res y pollo, la leche, los huevos, la mantequilla, el tomate, las naranjas, la mora, el tomate de árbol y las frutas frescas, con alzas que superan el 20 % y 30 %.
Sin embargo, hay otros productos que están realmente incomprables, pues ahora están costando más de un 50 % que hace un año. Es el caso de la cebolla (92,81 %), la arracacha (62,71 %) y el plátano (65,89 %), debido, principalmente, a las afectaciones en los cultivos por la temporada de lluvias en el país.
Un caso aparte es la yuca, pues está costando más del doble y en el último año su precio se ha incrementado un 131,08 %. Por el contrario, la papa es el producto que está contrarrestando la presión al alza en el grupo de los alimentos debido a una abundante oferta.
De acuerdo con la subdirectora del Dane, Julieth Solano, en agosto cambió la tendencia que se estaba viendo en el comportamiento en los precios de los alimentos para estos meses, ya que, tradicionalmente, los alimentos son baratos. “Los alimentos ya no son la división que contrarresta y frena el desempeño de la inflación, sino que este año estamos viendo que se acelera y se ubica en 1,85 % (mensual)”, aseguró.
Además de los alimentos, también se registraron fuertes alzas en los artículos para higiene corporal, artículos para el aseo personal, el corrientazo y las comidas rápidas.
Para Sergio Olarte, la depreciación del peso colombiano ha hecho que buena parte de los productos de la canasta familiar que tienen que ver con elementos importados como aseo, insumos para la producción de algunos alimentos, los electrodomésticos, también estén subiendo de precio, impulsando la inflación anual.
Así las cosas, Scotiabank Colpatria proyecta que la inflación para final de año puede estar entre el 11 % y el 11,2 %, con una desaceleración lenta para el próximo año en términos de que la indexación de precios es muy alta, es decir, apenas comience el año todo se volverá a ajustar contra la inflación pasada, que si es de alrededor del 11 %, pues eso podrá hacer que la desaceleración de la inflación sea difícil el próximo año.