Además de reiterar el panorama de informalidad, desigualdad y pobreza que amenaza a Colombia, por cuenta de la pandemia, la Ocde (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) alertó sobre la dificultad que tendría el país en este año para aprobar las reformas estructurales que requiere, de cara a la crisis sanitaria y económica.
“Ha habido un progreso limitado en las reformas estructurales, en parte, debido a las dificultades que ha tenido el Gobierno, para construir un consenso amplio a favor de las propuestas”, anotó el organismo que, además, puso el caso de lo sucedido en el 2018, cuando las autoridades aprobaron la reforma tributaria, que, sin embargo, fue tumbada por la Corte Constitucional.
Esa situación, de acuerdo con lo señalado por la Ocde, “consumió un capital político significativo”.
Ahora, según expresa la Ocde, “la crisis de la Covid podría reavivar el apetito por discutir más reformas estructurales, pero con las elecciones en 2022, la ventana política para hacerlo podría ser muy estrecha”.
Recomendaciones puntuales
En el capítulo del informe que se refiere a Colombia, el organismo menciona debilidades que tiene el país, las cuales requieren corregirse, si se quiere andar por la senda hacia un mayor desarrollo.
Por ejemplo, la Ocde menciona que la educación básica y profesional sigue siendo de baja calidad, y, a menudo, está desconectada de las necesidades del mercado laboral.
De igual manera, la misma pandemia puso de presente la urgencia de reducir las brechas entre la conectividad, al igual que las desigualdades regionales, que hacen que la gente salga de las ciudades pequeñas en busca de oportunidades, generando presión en las grandes ciudades.
Pero, para la Ocde, uno de los puntos en los que el país tiene que poner el foco es en la alta informalidad, pese a las mejoras que se han introducido. “Se requiere una estrategia integral de lucha contra la informalidad para asegurar que la recuperación genere empleos de alta calidad”, dice el informe.
Protección social
Para la Ocde, en Colombia, la crisis de la Covid puso en alto la necesidad de cerrar las brechas en protección social. Por ello, recomendó que “los esfuerzos adicionales para expandir los programas sociales deberían incluir una focalización más eficiente del gasto hacia los más vulnerables, principalmente, los de las zonas rurales.
En ese sentido, señaló que las transferencias en efectivo deberían ser complementadas con un componente de formación para mejorar las posibilidades de los beneficiarios de subsidios, de conseguir trabajos de alta calidad.
Todas esas necesidades son las que requieren las reformas estructurales que, según la Ocde, se hacen más difíciles en un año en el que ya empiezan a calentarse los ánimos políticos, para empezar las campañas electorales que terminarán, con la elección de un nuevo Gobierno.