El Consejo Nacional de Planeación (CNP), órgano encargado de garantizar la participación de la sociedad civil en la planeación de políticas públicas en el país, presentó el primer informe de seguimiento al Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026, titulado “Colombia potencia mundial de la vida”. Este documento analiza los avances y retos en la implementación de los cinco puntos principales y tres ejes estratégicos del plan, ofreciendo un diagnóstico sobre la gestión de Gobierno en su segundo año de mandato.
Bajo la estrategia “Las Regiones Hablan”, el informe, que abarca el periodo de mayo de 2023 a mayo de 2024, se construyó con base en visitas a todas las regiones del país. Además, contó con aportes de los sectores que integran el CNP, lo que permitió reunir una visión diversa y representativa sobre los avances y retos del plan.
Los avances: logros en medio de grandes desafíos
En temas de ordenamiento territorial y justicia ambiental, se reporta un avance del 31 % en la implementación de acuerdos para ordenar el territorio alrededor del agua, destacándose esfuerzos orientados a la sostenibilidad y protección de la biodiversidad. Sin embargo, el Fondo de Tierras, que debería haber entregado 3 millones de hectáreas, no ha cumplido su meta, lo que refleja deficiencias en la gestión de la Agencia Nacional de Tierras.
En cuanto a seguridad humana y justicia social, el informe resalta avances mínimos en el acompañamiento a familias en pobreza extrema, alcanzando apenas un 3,75 % de la meta proyectada. Las transferencias monetarias enfrentan barreras administrativas que afectan su eficacia, mientras que los territorios más apartados siguen sufriendo por la falta de conectividad digital y vial, especialmente en zonas como Chocó y Amazonas.
Por otro lado, el derecho humano a la alimentación muestra resultados mixtos. Aunque el Programa de Alimentación Escolar (PAE) logró una cobertura del 83,54 %, persisten problemas de ejecución en departamentos como La Guajira y Cauca. El CNP enfatiza la necesidad de fortalecer la infraestructura vial y los estímulos para los campesinos, elementos esenciales para garantizar la seguridad alimentaria.
Hablando sobre la transformación productiva, esta registra un avance del 35,73 % en la digitalización empresarial y del 6 % en la restauración de ecosistemas degradados, lo que refleja un ritmo lento frente a las expectativas iniciales. Sin embargo, el informe resalta iniciativas como la transición energética y proyectos estratégicos, como el tren interoceánico en el Pacífico, que buscan impulsar el desarrollo regional.
Las alertas: problemas estructurales que exigen atención inmediata
El CNP advierte que el eje de paz total, una de las banderas más criticadas del Gobierno, apenas ha ejecutado el 13 % de los proyectos propuestos. Las comunidades señalan la falta de garantías frente al control de grupos armados y cuestionan los avances en el proceso de pacificación integral.
En el ámbito económico, los altos niveles de informalidad laboral, sumados a los efectos de la reforma tributaria y las altas tasas de interés, continúan afectando el crecimiento del país.
El informe también critica la falta de descentralización, un aspecto que está limitando el impacto de las políticas en las regiones. Asimismo, se evidencia una ausencia de rendición de cuentas por parte del Gobierno, especialmente en lo relacionado con los avances del PND en los territorios.
Ante este panorama, el CNP insta al Gobierno Nacional y al Congreso a tomar medidas concretas para superar los obstáculos identificados. Se enfatiza la necesidad de fortalecer la descentralización, ajustar la Ley 152 de 1994 y garantizar una ejecución presupuestal más efectiva. Además, se pide mejorar la conectividad física y digital como pilares para el desarrollo regional.
El documento cierra destacando el compromiso del CNP con una planeación participativa y territorial. Según el Consejo, solo fortaleciendo estos procesos será posible alcanzar la paz y el desarrollo sostenible en las regiones de Colombia.