El Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial dieron a conocer algunas acciones coordinadas que llevarán a cabo, y que tendrán como objetivo acelerar el aprendizaje mediante la mejora de la transformación digital de los sistemas educativos de América Latina y el Caribe.
En línea en varias ideas y propuestas, ambas entidades se plantearon la promoción del crecimiento sustentable e inclusivo, por lo que la inversión actual es de US$512 millones para impulsar la transformación digital de los sistemas educativos en la región.
Ambas organizaciones esperan que esto impulse un mejor acceso a la conectividad, así como mejoras en dispositivos, plataformas educativas y el desarrollo de habilidades digitales para estudiantes y docentes.
Como resultados, más de 3,5 millones de estudiantes, más de 350.000 docentes y 12.000 escuelas serán beneficiadas en 16 países.
Además, las dos instituciones planifican una inversión adicional de US$400 millones para apoyar esta agenda de trabajo en los próximos dos años.
En agosto de este año, el presidente del BID, Ilan Goldfajn, y el presidente del Banco Mundial, Ajay Banga, firmaron un Memorando de Entendimiento para impulsar mejores resultados para las personas en América Latina y el Caribe, enfocado en tres áreas principales:
- Incrementar el apoyo para lograr una deforestación neta cero en el Amazonas.
- Fortalecer la resiliencia del Caribe ante desastres naturales
- Cerrar la brecha de acceso digital en toda la región.
Desde entonces, los equipos técnicos han desarrollado un plan e identificado acciones concretas para cumplir con esos compromisos.
Sobre el tema, la vicepresidenta de Sectores y Conocimiento del BID, Ana María Ibáñez, y el director de Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, Jaime Saavedra, explicaron durante un evento conjunto en la sede del BID, en Washington D.C., que esta colaboración irá más allá de las operaciones e incluirá la co-creación de nuevo conocimiento y bienes públicos.
Las dos instituciones desarrollarán recomendaciones y plataformas para acelerar el proceso de conexión de escuelas y avanzar hacia la universalización, la compra de equipos y dispositivos, y la capacitación docente para mejorar el aprendizaje de los estudiantes.
“Esta colaboración es más grande que la suma de las dos partes. Al unir nuestras fortalezas y recursos, nos comprometemos a mejorar los aprendizajes y abrir nuevas oportunidades para el desarrollo del capital humano”, dijo la vicepresidenta del BID, Ana María Ibáñez.
“Estamos convencidos que la educación de calidad, accesible para todos y a lo largo de toda la vida, es esencial para superar la pobreza y la desigualdad. No hay crecimiento sostenible sin acumulación de habilidades, y para desarrollar oportunidades de aprendizaje mejoradas necesitamos aprovechar las nuevas tecnologías”, agregó.
“En el Banco Mundial, estamos comprometidos con cerrar la brecha digital en América Latina y el Caribe. Trabajando conjuntamente, podemos avanzar más rápido. Sólo esta iniciativa nos permitirá brindar mejores oportunidades para más de tres millones y medio de estudiantes y 350.000 docentes. El factor esencial para mejorar el aprendizaje son los docentes efectivos, y las tecnologías digitales pueden potenciar dramáticamente el trabajo del maestro en el aula y ayudarnos a llegar eficazmente a todos los niños”, enfatizó Jaime Saavedra, director de Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe del Banco Mundial.