El sector de vivienda en Colombia ha experimentado un panorama complicado durante los últimos años. La llegada del Gobierno Petro fue un punto de inflexión para este sector, pues hubo una serie de decisiones que impactaron la asignación de subsidios y con ello la compra de unidades habitacionales en el país.
El mayor impacto se dio cuando el Gobierno decidió modificar los subsidios de vivienda y cambiar los requisitos del programa ‘Mi Casa Ya’. Antes, una persona que quisiera acceder a este subsidio debía demostrar ingresos menores a los 4 salarios mínimos y así podía obtenerlo. Ahora ya no necesita demostrar este dinero, sino simplemente estar incluido en un grupo determinado del Sisbén.
Luego de ello, la caída en las ventas del sector se disparó y con ello también se empezó a deteriorar esa industria, pues se perdieron miles de puestos de trabajo. Hace algunas horas la Cámara Colombiana de Construcción (Camacol) elevó una nueva alerta al Gobierno por algunas medidas anunciadas por la administración y que darían un duro golpe al sector.
En el llamado, compartido a través de un comunicado, destaca el difícil panorama que afrontan, tras la reducción en el número de subsidios disponibles en ‘Mi Casa Ya’ para el siguiente año. “Tendrán efectos negativos en la producción de vivienda popular y en el empleo a nivel nacional”, indicaron.
“La principal preocupación del gremio es que la menor disponibilidad de subsidios vuelva a generar un crecimiento en el número de hogares que deben desistir de la compra de su vivienda. Esto necesariamente afectará los ritmos de obra y el empleo, en un escenario en el cual no se ha implementado el plan de reactivación del sector anunciado por el Gobierno nacional”, afirmó Guillermo Herrera, presidente de Camacol.
El gremio además asegura que se prevé que el presupuesto para programas de vivienda se reduciría en un 39 % para 2025, pasando de unos $ 4,3 billones en 2024, a unos $ 2,66 billones para ese año. El Ministerio de Vivienda aseguró que solo cuenta recursos para 20.500 subsidios de los 50.000 que habían anunciado inicialmente. Es importante recordar que de esa cifra, solo 6.000 subsidios ya están preasignados.
“Si a los desistimientos se le suma la caída en las ventas, el ritmo de inicios de obra podría ubicarse por debajo de las 55 mil VIS en 2025, un nivel cercano al que se observó entre 2010 y 2011″, señaló Herrera, quien agregó que los menores ritmos de obra se traducirían “en la pérdida de 200 mil puestos de trabajo durante 2025″.
Además de ello, la agremiación aseguró que las cifras más recientes del Dane revelan que en agosto de 2024, la construcción fue el sector de la economía que más puestos de trabajo perdió, con 84.000 plazas. Además, en el segmento de vivienda se perdieron más de 79.000 empleos, de los cuales 47.000 fueron trabajos de obreros, oficiales y operarios. El presidente del gremio recalcó que se están afectando los hogares y trabajadores de menores ingresos.
“No hay un plan de reactivación y, por el contrario, las medidas de política golpean fuertemente la producción de vivienda de interés social”, sentenció Herrera.
Apuntaron además a que desde julio de 2023, el Gobierno nacional viene anunciando una política de recuperación económica para impulsar el crecimiento del país, para lo cual se mencionó de manera reiterada la necesidad de proteger el empleo e impulsar sectores que generar impacto en el corto plazo.
Sin embargo, ese plan no ha sido implementado y las políticas públicas adoptadas estarían disipando los esfuerzos que desde el sector privado se viene realizando para reactivar la vivienda.