La Comisión Económica para América Latina (Cepal) reveló las principales conclusiones del informe anual La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe 2022, en donde da a conocer el comportamiento que registraron los flujos de capital que aterrizaron en la región durante el año pasado.

El organismo señala que América Latina y el Caribe recibió 142.794 millones de dólares de inversión extranjera directa (IED) en 2021, cifra que representa un incremento del 40,7 % frente al año inmediatamente anterior. Mientras tanto, en los países, los que recibieron los mayores flujos por este concepto fueron: Brasil (33 % del total), México (23 %), Chile (11 %), Colombia (7 %), Perú (5 %) y Argentina (5 %).

En el caso de Colombia, la Cepal señala que los flujos de capital extranjero fueron de 9.727 millones de dólares, un 30,4 % más que en 2020. “A pesar de este aumento, aún está lejos de alcanzar el nivel promedio de la década de 2010 (13.296 millones de dólares)”, subraya.

En cuanto a sectores económicos, el de servicios fue el mayor jalonador de los recursos por este concepto, acaparando el 66 % del total de la IED que aterrizó en el país y representando un crecimiento del 17 % con respecto al 2020. Seguido de esto se encuentran los servicios financieros y empresariales, así como el sector de transportes, almacenamiento y comunicaciones.

“Si bien los tres grandes sectores de la economía presentaron variaciones positivas de las entradas de inversión extranjera directa en 2021, el sector de los recursos naturales mostró la variación más alta (81 %) y representó el 20 % del total, producto de un notorio crecimiento en la actividad de minas y canteras (114 %) y un aumento menor en el sector del petróleo (72 %)”, destaca el informe.

Sobre la industria de hidrocarburos, la Cepal señala: “Ha mostrado una tendencia decreciente desde los niveles máximos alcanzados a inicios de la década de 2010″. Esto ha redundado en que su participación pasara del 34 % de la inversión extranjera entre 2010 y 2014 al 21% entre 2015 y 2019, y el 8 % en 2021. Por su parte, las manufacturas recibieron el 14 % de las entradas, con una variación del 51 %.

Colombia recibió estos flujos de capital, principalmente de los Estados Unidos (19 % del total) y España (15 %), “aunque desde España se recibieron menos inversiones que en 2020 (-14,1 %)”, indica el informe, que también resalta aumentos en estos flujos, procedentes de los Países Bajos (12 % del total), Suiza (11 %), Panamá (7 %) y el Reino Unido (4 %).

Como aspecto a destacar en el comportamiento de la IED que llegó a Colombia el año pasado, la Cepal menciona la operación de adquisición del 45,8 % restante de las acciones de Productos Familia S.A. al grupo sueco Essity. Al igual que la venta de la Sociedad Portuaria Regional de Barranquilla, perteneciente al fondo de inversión latinoamericano Southern Cross Group, Ocensa y el Grupo Empresarial Olímpica.

“El fondo de inversión estadounidense I Squared Capital Advisors LLC adquirió el 78 % de la sociedad colombiana, por un monto de 20 millones de dólares. El motor de esta venta fue la necesidad de nuevas inversiones en infraestructura, pues el puerto presenta problemas de sedimentación que se tradujeron en una restricción del 80 % de las operaciones de ingresos y salidas en el puerto”, se lee en el documento.

Pese a que América Latina registró un crecimiento en recursos de inversión, el informe de la Cepal da cuenta de que la región perdió participación como destino de las inversiones mundiales, representando 9 % del total de estos flujos. “Uno de los porcentajes más bajos de los últimos diez años y lejano del 14 % que se registró en 2013 y 2014″, resalta el informe.

Para el año pasado, las inversiones mundiales fueron de 1,6 billones de dólares, cifra que representa un dinamismo del 64 % con respecto al 2020. Estos recursos fueron jalonados por la Unión Europea y Estados Unidos, que fueron los principales inversionistas en 2021, representando el 36 % y 34 % del total, respectivamente.