En el marco de la Cátedra China, realizada esta semana en el Ministerio de Relaciones Exteriores, la vicepresidenta y canciller, Marta Lucía Ramírez, se refirió a la situación económica actual del país con el gigante asiático y destacó que poco a poco Colombia se está abriendo paso en este mercado.
Ramírez aseguró que la nación ha logrado convertirse en un destino atractivo para las inversiones chinas, principalmente gracias al acuerdo bilateral para la protección y la promoción de las inversiones entre los dos países.
“Hoy China es el primer inversionista asiático en Colombia. Por esta razón, tienen 38 proyectos con participación de empresas chinas dentro de los cuales se destacan el Metro de Bogotá, Regiotram de Occidente, entre otros. Estos proyectos han dejado inversiones por un valor de más de 2.000 millones de dólares”, señaló la alta funcionaria.
Así mismo, destacó que el comercio entre ambos países es “900 veces más grande” que el que se tenía en los años ochenta cuando iniciaron las relaciones diplomáticas, al tiempo que dijo que este trabajo ha permitido dinamizar la economía nacional, razón por la cual no se pueden perder estos lazos de cara al futuro.
“Vemos un crecimiento muy significativo de las exportaciones a China con un aumento del más del 50 %. Esas exportaciones han venido creciendo cada vez más hacia las no tradicionales (…) hemos visto cómo China se convierte en el segundo socio comercial de Colombia y la primera fuente de los productos que importa nuestro país”, agregó.
Durante su intervención, Ramírez también hizo énfasis en la dinámica política, cultural, filosófica, económica de China, que tiene cada vez mayor peso a nivel global, al punto en que sus indicadores mueven los del resto del mundo. Actualmente, este país es una de las economías emergentes más importantes, pese a las afectaciones que está teniendo por cuenta de las medidas anti covid-19.
“El legado de China ha sido muy integral, es un legado histórico. Los chinos honran su legado, su civilización, se sienten orgullosos de su civilización a pesar de épocas de mucha oscuridad, mucha pobreza e incertidumbre, pero hay ese sentido de autoestima, de respeto propio. Para darse cuenta de eso basta con dar una mirada a la revolución económica que logró en muy pocas décadas posicionar a China como la segunda economía más grande a nivel global”, afirmó la vicepresidenta.
Por su parte, el embajador chino en Colombia, Lan Hu, señaló que ante el nuevo periodo de turbulencia y cambio que vive el mundo de hoy, “China siempre ha representado la estabilidad y la energía positiva, con la que tal vez se puede encontrar las respuestas a las preguntas que nos hacen la época actual”.
El embajador chino también se refirió al buen estado de las relaciones bilaterales expresadas en un dicho común entre China y Colombia: “amigo en la adversidad, amigo de verdad”, gracias a la asistencia mutua, la solidaridad y la cooperación en términos de ayuda en casos de desastres naturales, cooperación durante la pandemia y en materia de vacunas.
“Al mismo tiempo, el entendimiento mutuo entre los dos países es particularmente importante. Es que solamente cuando uno conoce a sí mismo y al otro, pueden convertirse en oportunidad del desarrollo el uno para el otro. China siempre está dispuesta a profundizar la cooperación en varios campos con Colombia por el bienestar de los dos pueblos”, concluyó el embajador chino.
Ambos funcionarios cerraron su participación manifestando que se debe mantener y reforzar el trabajo que por años han adelantado entre las dos naciones, ya que esto es lo que ha permitido sortear gran parte de las adversidades que trajo consigo la pandemia en todo el mundo.