Con los créditos hipotecarios suele haber una disyuntiva: alegrarse porque hay más o preocuparse, porque hay una inflación alta que pone contra las cuerdas a los hogares para pagar las cuotas, pues apenas los ingresos alcanzan para la comida.

Para millones de familias, el crédito es la única alternativa a la vista para comprar casa y, de hecho, es motivo de alegría cuando lo logran, pero en los actuales momentos, cuando los intereses de los créditos están altos y el Banco de la República se prepara para un nuevo incremento en las tasas de interés de referencia, empieza la preocupación.

Más aún, si son tan altas las cifras de deuda en créditos hipotecarios, es decir, son muchos los hogares que deben destinar gran parte de su ingreso para pagar cuotas de préstamos de vivienda.

Según informe presentado este miércoles por el Dane, con corte al cuarto trimestre de 2021, las entidades que financian vivienda en el país registraron un saldo de capital total de la cartera hipotecaria equivalente a 104,1 billones de pesos, lo que representó un incremento de 3,3 % en comparación con el tercer trimestre de 2021 y un incremento de 12,0 % en comparación con el mismo periodo del año anterior.

La ecuación indica que el 75,4 % de la cartera hipotecaria la tomaron los colombianos como crédito de vivienda (es decir, aunque tienen que esperar muchos años, algún día serán los propietarios) y el restante 24,6 % del saldo corresponde a leasing habitacional, una especie de arriendo con opción de compra.

Deuda para vivienda VIS

El componente de crédito de vivienda, sin incluir el leasing, equivale a un monto de 78,5 billones de pesos, de los cuales, el saldo para la financiación de vivienda VIS (interés social) fue de 27,4 billones, lo que representó un incremento trimestral del 4,7 %. Entre tanto, 2,5 billones pertenecen a la vivienda de interés prioritario, lo que significa una variación de 0,2 %.

La clase media debe casi el doble

Entre tanto, la vivienda no VIS, es decir, la que compran las personas desde la clase media en adelante, tiene un saldo de capital de 51 billones de pesos, correspondientes a una variación trimestral de 2,5 % frente al trimestre julio-setiembre de 2021, cuando fue de 49,8 billones de pesos.

Ya la inflación está poniendo freno a la compra de vivienda. En el índice de confianza del consumidor, la disposición a comprar vivienda se ubicó en -22,6 % en abril, luego de haber estado en -17,8 % en marzo.

Y no es para menos. Según un reciente informe de Ciencuadras.com, el porcentaje general de alza en los precios de vivienda es de 8 %, y, visto de manera individual, la vivienda VIS tuvo un aumento de 6 % y la No VIS en 5 %.

Construcción de vivienda en Bogotá | Foto: GUILLERMO TORRES REINA

Bancos, los que más prestan

En el cuarto trimestre de 2021, los establecimientos de crédito prestaron el 85,9 % del saldo de cartera hipotecaria; el 9,5 % corresponde a préstamos del Fondo Nacional del Ahorro, el 3,4 % a Cooperativas, Fondos de Empleados y Fondos de Vivienda, mientras que las Cajas de Compensación Familiar prestaron el 0,7 % del total de la cartera, y Otros Colectores, el 0,5 %.

Y el alza en el costo de vida sigue

Hay que recordar que la inflación de abril, certificada por el Dane, fue de 9,23 % y la vivienda es el principal gasto que tienen los hogares colombianos. La tasa de interés del Banco de la República se ubica en 6 %, en la antesala a una nueva subida de 100 puntos básicos, según pronósticos de analistas, lo que se daría en la reunión de mayo de la junta del Emisor, el 27 de este mes.

Algunos pronósticos de analistas indican que las tasas de interés de referencia llegarán al cierre de 2022, a ubicarse por encima del 8 %, lo que tardará algunos meses en reflejarse en las tasas de interés comerciales, por lo que la preocupación con los créditos hipotecarios va para largo.