La economía mundial se ha visto afectada por la pandemia del coronavirus, lo que ha tenido un gran impacto en rubros como el desempleo, la inflación y la devaluación de las diferentes monedas, pese a que en 2021 se avanzó la reactivación de los sectores afectados por la propagación del virus.
En el caso de Colombia, ese proceso de reactivación ha permitido mejorar algunos indicativos de la economía y aumentar de manera histórica el salario mínimo en un 10,07 %, con lo cual supera el millón de pesos, sumando el auxilio de transporte.
Sin embargo, hay preocupación por lo que significó en los últimos meses de 2021 el aumento del valor del dólar, que superó la barrera de los $4.000 y que se ha mantenido incluso al comienzo de este año. De acuerdo con la Tasa Representativa del Mercado (TRM), aunque hubo una reducción de -1.02 %, por un dólar se pagan $ 4,042.36.
El portal noticioso Today in 24 señala que esta situación ha llevado a que el peso colombiano se convirtiera en 2021 en la moneda más devaluada del mundo, situación que ha generado preocupación entre los expertos debido a que podría agudizarse, teniendo en cuenta que el país se encuentra en periodo electoral.
El economista Andrés Moreno dijo que, aunque la devaluación del peso genera mayores ganancias para los exportadores, trae consigo pérdidas a quienes deben importar productos, pues los costos son mucho más elevados.
En ese sentido dijo que el impacto también se siente en el bolsillo de los colombianos, pues quienes deciden viajar o hacer inversión extranjera deben entregar más pesos para recibir un dólar.
“Tenemos cinco meses de tensión política, los fondos extranjeros y países emergentes no quieren saber nada de Colombia y por lo pronto vamos hacia máximos que vimos en marzo de 2020, cuando fue el pánico por la pandemia”, explicó a la emisora La W.
Recordó que el valor del dólar se mueve teniendo en cuenta los factores de la oferta y la demanda, es decir, de la relación que existe entre el comprador y el vendedor, por lo que no se puede prever que puede pasar en los próximos meses.
Aseguró que lo que se ha podido observar es que algunos fondos extranjeros han venido saliendo de Colombia ante la incertidumbre, por lo que previó que para 2022 los inversionistas lo que quieren hacer es comprar dólares y tener bajo su poder monedas fuertes, sacando de sus prioridades, además, a otros países como Perú y Chile.
Estimó que sobre el impacto del valor del dólar también pesa la expectativa por los resultados de las próximas elecciones presidenciales, lo que llevaría a que esa divisa “se vaya de nuevo a máximos históricos, seguramente sobre $4.200″.
“Los países como Perú, Chile y emergentes, han tenido fuertes devaluaciones también. En Colombia lo que ocurre también es que, adicionalmente, nos quitaron el grado de inversión, tenemos una moneda bastante débil. Por alguna razón la moneda colombiana es más volátil cuando hay alguna crisis”, agregó.
Indicó que “no ha importado que el petróleo esté arriba, el crecimiento de la economía colombiana, la recuperación del empleo le ven riesgo a Colombia. Es normal que esto ocurra de acá a junio de este año. Pues no habrá inversión extranjera hasta que pasen las elecciones”.
Por su parte, el director de Investigaciones de Alianza Valores y Fiduciaria, Felipe Campos, dijo en el diario La República que por lo menos el 4 % de la devaluación del peso colombiano está relacionada directamente con la expectativa sobre los resultados de las elecciones presidenciales.
De acuerdo con cifras del portal Bloomberg, el peso colombiano tuvo una caída del 5,99 % desde el pasado mes de octubre frente a la divisa norteamericana. Le siguieron el peso mexicano y el chileno, con pérdidas de 4,51 % y 2,13 %, respectivamente.
Sin embargo, Today in 24 estimó que el peso colombiano frente al dólar acumuló durante el 2021, una depreciación del 14,20 %, por encima de países como Turquía con 14,03 % y Argentina -13,25 %.
En una reciente entrevista con SEMANA, el presidente de Analdex, Javier Díaz Molina, aseguró que la “devaluación lo que está mostrando es que la economía está golpeada: tenemos un déficit en la cuenta corriente originado en el déficit de la balanza comercial y ahí la tasa de cambio actúa como variable de ajuste”.
Entre tanto, el gerente de investigaciones económicas de Acciones & Valores S.A., Wilson Tovar, dijo que “hay que tener presente la pérdida de grado de inversión, además que las importaciones bordean casi los US$5.000 millones mes, mientras que las exportaciones están alrededor de los US$3.200 millones”.
“Lo que se traduce en que estamos sacando más dólares de los que entran, por eso decimos que hay un déficit de cuenta corriente superior al 5 % del PIB y eso hace más vulnerable a la moneda”, señaló en declaraciones al periódico Portafolio.