La Navidad se salvó de un desabastecimiento del gas, pero el panorama no está despejado con el combustible. Se está importando gas mes a mes, lo que permitió cubrir la demanda esencial debido al déficit que venían anunciando los gremios como Naturgas, cuya presidenta, Luz Stella Murgas, habló de la real situación.
Los usuarios no escaparán de sentir en el bolsillo el efecto de tener gas importado de a poco. De hecho, ya lo han sentido los que utilizan gas natural vehicular en algunas regiones del país: en Manizales, por ejemplo, se presentaron incrementos, por restricciones en las ventas.
Claramente, es más costoso comprar gas natural por mes que a largo a plazo, como lo expresa la alegoría que hizo Murgas con la compra del huevo diario. En otras palabras, estamos salvando la situación con soluciones temporales que, de ninguna manera, se pueden volver normales.
Si dejaran perforar nuevos pozos, el escenario sería distinto, indicó Murgas. Pero, como se sabe, la política de la administración de Gustavo Petro es no amigable con la exploración y explotación del subsuelo.
Se niega el déficit, pero se expiden reglas de importación
El Gobierno ha venido negando el déficit que, en todo caso, es diferente al desabastecimiento, según explicó Murgas (el primero es de más largo plazo, el segundo es momentáneo). No obstante, para la directiva de Naturgas, el hecho de que el Gobierno haya expedido regulación para importar, es evidencia de que, en efecto, si hay déficit.
Los roces no han sido pocos. De hecho, el 1.° de diciembre, cuando se empezó la importación para la demanda esencial, el propio Ministerio de Minas salió a decir que iniciaría investigaciones a los que importaron, pues, según sus cuentas, había suficiente gas en el país para el suministro interno.
El gas, en el caso del que abastece la demanda térmica, que era para lo que se importaba hasta el momento, se compraba por 3 años. Para entonces, había cierta tranquilidad para garantizar la comercialización. Ahora se adquiere mes a mes. ¿Por qué?
Se pueden encarecer las facturas
En condiciones de mercado el precio del gas va a seguir subiendo al de paridad internacional, tendencia en medio de la cual —además— se mantendrá con alta volatilidad, lo que sin duda, afectará el precio al consumidor. ¿En cuánto? Todo dependerá de las circunstancias.
Para diciembre, por ejemplo, los gremios hablaban de la necesidad de importar para la demanda esencial, debido al vencimiento de los contratos, el 1.° del último mes del año. En efecto, solo hubo dos procesos de comercialización que salvaron la patria. Uno, equivalente al 4 % del gas importado, el otro provino del 1,4 % de gas de Ecopetrol. Con esas cantidades se sorteó la situación alrededor de la cual venía alertando Naturgas.
Posteriormente, Ecopetrol abrió un contrato adicional, del 3 %, que es con el cual vamos a pasar la Navidad. El enigma sigue siendo ahora 2025, pues sin compras de gas en firme no hay tranquilidad.
Ojo, comprar gas mes a mes no puede ser la normalidad
La compra del gas como si fuera viable tener solo un huevo diario se debe a que se tuvo que flexibilizar la regulación para tener el combustible a más corto tiempo.
Existen dos escenarios alrededor del déficit del gas que se relacionan con las condiciones climáticas, pero no son realistas, a juicio de Murgas. Así, si en los 365 días del año las condiciones de hidrología son adecuadas para la generación de energía a partir del agua, sin que tenga que usarse gas en las térmicas, el suministro estaría garantizado. Según la cantidad de agua que caiga se ejerce presión sobre la demanda de gas importado para las térmicas, que son prioridad. De esa manera, si llueve en cierta cantidad, el déficit estimado es de 5.
El déficit es de gas en firme, enfatizó Murgas, y por ahora solo estamos aplicando cuidados paliativos. ¿Se podrá curar la enfermedad?