A la lupa de las comisiones económicas del Congreso de la República, que sesionarán el miércoles 20 de septiembre desde las 8 de la mañana, entrará el proyecto de ley de Presupuesto General de la Nación 2024, por 502,6 billones de pesos, de los cuales, si se mira por asignación de sectores, los que ocupan los primeros lugares en el monto que tendrán para el próximo año son Educación, Salud y Defensa.
Este martes fue radicada la ponencia que se someterá a votación en la jornada prevista para el primer debate, el cual lo adelantan las comisiones económicas conjuntas (terceras y cuartas), del Parlamento colombiano.
En el texto radicado y anunciado en la sesión legislativa de este martes, hay 86 artículos, luego de los ajustes que le hicieron al proyecto original, el cual venía con 83 ítems.
¿Hubo peluqueada?
Pero, más allá de nuevos artículos, hay que poner el lente en la ‘peluqueada’ que habitualmente le hacen a los recursos. No obstante, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, confirmó que no se le hicieron mayores ajustes. Simplemente, un cambio de partidas entre gastos de funcionamiento e inversión, por 1,6 billones de pesos.
“El cambio es para aportarles a algunas entidades sobre las cuales existían algunas inquietudes”, sostuvo el funcionario.
Hay que señalar que, en el proceso de ajustes al presupuesto 2024, fueron radicadas 159 proposiciones. Con ellas, se pretendió solicitar gastos, a los originales que traía la carta financiera, por 31,1 billones de pesos, lo que, de tenerlos en cuenta, debe hacerse solo moviendo partidas de un lado a otro, ya que en días pasados los parlamentarios habían aprobado el monto total de 502,6 billones de pesos.
Inclusive, la cifra presupuestal para 2024 fue criticada en el debate de aprobación del monto, pues algunas voces señalaban que no había claridad sobre su financiamiento.
Así las cosas, la cifra que ahora solicitaban las entidades que hacen parte del presupuesto, por más de 31 billones, “claramente excede las posibilidades fiscalmente responsables”, concluyeron los ponentes del proyecto de ley que trabajaron con el Gobierno nacional en los ajustes.
Recomposición
El proyecto original del Presupuesto General traía una asignación de 310,3 billones de pesos para gastos de funcionamiento y ahí fue donde estuvo el movimiento de asignaciones. En la ponencia se evidencia que este rubro bajará a 308,7 billones de pesos, mientras que la destinación de recursos para pagar la deuda queda prácticamente intocable (94,5 billones de pesos), teniendo en cuenta lo que ha venido mencionando el ministro Bonilla, y es que hay un compromiso de pago que es ‘impajaritable’, con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Entretanto, en lo que tiene que ver con la inversión, que es el gasto que realmente se verá reflejado en obras para el beneficio de los ciudadanos, la asignación sube a 99,3 billones de pesos, de acuerdo con lo que muestra la ponencia radicada.
Por sectores
La representante a la Cámara, Olga Lucía Velásquez, quien es una de las ponentes del proyecto de ley, destacó las asignaciones para sectores sociales como educación y salud, que están en la delantera, con los mayores montos. “Educación contará con 70,4 billones y en segundo lugar salud con 61,5 billones. El tercer lugar es para Defensa, con 55,5 billones de pesos”, sostuvo.
El ministro de Hacienda agregó un cuarto sector que sigue a los tres mencionados por Velásquez y es el de su resorte, del cual, dijo, aunque tiene un monto alto, porque maneja varias bolsas que se necesitan para irrigar recursos a otras entidades, según las necesidades en el transcurso del año, la idea es que dichas bolsas se reduzcan a la mitad, de manera que cada entidad vaya recibiendo desde el principio de la elaboración del Presupuesto, sus recursos.
Por lo demás, le asignaron más recursos al Ministerio de la Igualdad, al Sena y a la entidad que maneja el Régimen de Prima Media de Pensiones (Colpensiones).
Agricultura y Vivienda también están entre los que pusieron el sombrero y recibieron un poco más de plata a la inicialmente asignada.
En todo caso, la última palabra la tendrá el Congreso de la República, donde le darán, tanto el primer debate en comisiones económicas conjuntas, como el segundo y final, en plenarias de Senado y Cámara.