El Consejo Gremial Nacional manifestó este viernes su rechazo enfático contra los ataques violentos que algunos integrantes de la minga indígena cometieron el día de hoy en contra de SEMANA, irrumpiendo en sus instalaciones, y usando la fuerza para amedrentar y agredir a los trabajadores que allí se encontraban.
De igual manera, rechazó la invasión y la destrucción a la propiedad privada que distintas comunidades vienen haciendo en el campo colombiano, afectando a la población ya los sectores productivos, y con ello al desarrollo social y económico del país.
“Hacemos un llamado al Gobierno Nacional para que proteja y salvaguarde el derecho constitucional a la libertad de expresión y a la propiedad privada. Una sociedad es democrática y justa, sólo cuando puede expresar su opinión, sin temor ni presiones indebidas o amenazas contra su integridad”, dijo la entidad.
“Le solicitamos a las autoridades judiciales y de policía que se adelanten las correspondientes investigaciones y se judicialice a los responsables de estos hechos, y así evitar que situaciones como estas vuelvan a presentarse”, agregó.
Sobre el hecho también se pronunció la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), que rechazó los mencionados actos de violencia registrados.
“Repudiamos este ataque a la libertad de expresión, pilar fundamental de la democracia, en momentos en los cuales todos debemos sumar esfuerzos para lograr la reconciliación y respetar las diferencias”, dijo el gremio.
Y agregó que: “Desde Camacol siempre hemos respetado el derecho a la protesta pacífica, pero los hechos registrados hoy son actos de violencia que no aportan a la construcción del país. Nuestra solidaridad con todos los trabajadores de la revista Semana”.
Este viernes 29 de septiembre, alrededor del mediodía, integrantes del pueblo indígena Minga, que habían acudido a participar en una marcha convocada por el presidente Gustavo Petro, tomaron por la fuerza las instalaciones de SEMANA en el norte de Bogotá.
Tras irrumpir, rompieron las ventanas de la entrada y atacaron a uno de los guardias. La captura de la población indígena duró casi una hora. Las personas presentes en la planta baja, algunas de las cuales eran empleados de SEMANA y otras empresas con sede en el edificio, se sintieron intimidadas y asustadas por la violenta protesta.
En las instalaciones reinaba el pánico. Y SEMANA rechazó enérgicamente este grave ataque a la libertad de prensa.
Desde distintos sectores, entre colegas de otros medios, políticos y gente común, este acto fue rechazado en las redes sociales con diversos comentarios.
Durante los hechos, policías se hicieron presentes en el lugar y los indígenas evacuaron la sede de SEMANA. La cabra se estacionó frente al edificio de la carrera 11 con calle 77, y desde allí descendieron los violentos manifestantes.
La minga intimidó a quienes estaban en las instituciones y recurrió a la violencia para poder ingresar. El personal de seguridad de la planta baja vivió momentos de pánico absoluto. Entre ellos, uno de los guardias fue lastimado en el cuello.
Además, se produjeron daños materiales: se rompieron algunos cristales de las instalaciones de este medio de comunicación.
Posteriormente, la entrada a SEMANA fue custodiada por agentes policiales.
Luego de los hechos, autoridades como la Fiscalía General indicaron a través de la red social X que se dirigían al edificio de SEMANA.
“La Fiscalía General de la Nación se desplaza a las instalaciones de la revista SEMANA, en Bogotá, para investigar la irrupción de un grupo de personas que, al parecer, ingresó a la sede de manera violenta. El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) adelantará las investigaciones del caso para determinar los posibles hechos de vandalismo y hacer la respectiva judicialización”, precisó el organismo de control.
Además, SEMANA conoció que el secretario distrital de seguridad, Óscar Gómez Heredia, y la jefa de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Sandra Hernández, también se desplazaron al edificio donde se produjo el ataque de la población indígena minga para iniciar la investigación correspondiente.