El precio del dólar es un tema que sigue vigente en las agendas de los principales mercados del mundo, por cuenta de la disparada que viene presentando desde hace varias semanas. Esta se debe a la tensión por una posible recesión en Estados Unidos, por la crisis energética que se avecina en Europa y por una inflación que presiona mercados como el del petróleo.

Para el caso de Colombia, esta moneda ha marcado niveles que oscilan entre los 4.300 y los 4.400 pesos a lo largo de esta semana.

Así mismo, en Europa, el dólar volvió a superar al euro (por segunda vez en menos de un mes) y llevó a monedas como el yen japonés y la libra esterlina de Reino Unido a niveles que no se veían hace 20 años.

En el caso de América Latina, el dólar ha presionado con fuerza al alza a divisas como el real brasilero (que oscila entre 5,11 y 5,20) y los pesos mexicanos y chileno, aunque este último también ha caído por cuenta de la intervención de mercados que se dio en territorio austral ante la recesión, que está más cerca de lo deseado.

En medio de toda esta volatilidad, una de las monedas más afectadas ha sido el bolívar (divisa oficial de Venezuela), que en menos de un día ha perdido más del 10 % de su valor frente al dólar, pese a que esta economía se respalda en sus buenos reportes de producción petrolera.

De acuerdo con el Banco Central de Venezuela, el bolívar cerró la jornada de ayer jueves con un valor de 7,8083 por dólar, lo cual demuestra una caída bastante fuerte con respecto al 7,0147 que marcó en el cierre anterior (miércoles 24 de agosto), pese a que los precios internacionales del crudo han marcado una tendencia al alza esta semana.

Así mismo, la cotización del dólar en el mercado paralelo, que rige algunas de las operaciones, superó ayer jueves los 9 bolívares, con lo que se amplía la brecha entre las dos tasas de cambio, conforme al portal web Monitor Dólar Venezuela, que ofrece la cotización diaria.

¿Qué está pasando con el dólar?

De acuerdo con los expertos, el temor a una recesión en los Estados Unidos y Europa (que parece inevitable) está llevando a muchos inversionistas a buscar nuevamente los famosos ‘activos refugios’, commodities o divisas que se caracterizan por su estabilidad, como el dólar, situación que eleva su valor por ley de oferta y demanda.

Actualmente, los mercados en el mundo siguen a la expectativa por lo que pueda suceder con la economía en las principales potencias, ya que, por un lado, pese a que Estados Unidos parece que por fin controló la escalada de inflación, las constantes alzas de las tasas de interés amenazan con una fuerte contracción de la economía.

La lucha contra la inflación en Estados Unidos “hará sufrir a las familias y las empresas”, pero renunciar sería peor para la economía, advirtió el viernes el presidente de la Reserva Federal (Fed, banco central), Jerome Powell.

En una declaración de rara contundencia durante la conferencia anual de banqueros centrales de Jackson Hole (Wyoming), advirtió que la Fed utilizará “vigorosamente todas sus herramientas” para combatir el alza de precios, a través de la subida de tasas.

Además, sostuvo que volver a la estabilidad de precios “tomará tiempo” e implicará “un largo período de crecimiento más débil”.

Por otra parte, en el caso de Europa, la crisis por la guerra en Ucrania y la escasez en suministro de gas por la respuesta de Rusia a las sanciones económicas que le han impuesto asustan a muchos con un posible aumento en las tarifas de energía, lo que podría presionar aún más la elevada inflación.

El tope tarifario de la energía de los hogares en Reino Unido aumentará 80 % a partir de octubre y las facturas de gas y electricidad podrían seguir incrementándose de forma “considerable” en 2023, en plena crisis por el alto costo de vida. El tope pasará de las actuales 1.971 libras (unos 2.325 dólares) que paga al año un hogar medio a 3.549 libras (4.180 dólares), anunció el regulador OFGEM.

*Con información de AFP.