Ecopetrol es una de las empresas más importantes del país y ha sido clave, desde hace varios años, para la economía nacional. Esto se debe principalmente a que el Estado es accionista de la mayoría de la empresa, con un 88 % de participación, por lo que cualquier movimiento tiene serias repercusiones en las finanzas nacionales y en la caja del Estado, que se beneficia de la entrada de dólares que genera la compañía por las ventas de crudo en el exterior.
La llegada del Gobierno Petro ha implicado para la compañía un cambio abrupto en sus objetivos, pues para nadie es un secreto la intención de la actual administración de descarbonizar la economía y paulatinamente eliminar el uso de hidrocarburos. Es preciso recordar que actualmente la mayoría de líneas de negocio de la petrolera se enfocan en hidrocarburos como el gas y la gasolina y que la transición energética allí apenas ha dado algunos pasos.
Una de las iniciativas que fue un punto de inflexión para la empresa fue la suspensión de los contratos de exploración y explotación de hidrocarburos, decisión que ha repercutido fuertemente en la soberanía energética del país. Tanto así que desde varios gremios se ha alertado por el riesgo del desabastecimiento de gas y la necesidad de empezar a importarlo de otros países, situación que traería consigo un aumento en los precios de las facturas que pagan los consumidores.
Ante este complicado panorama, la petrolera ha tomado decisiones para hacerle frente al riesgo inminente de desabastecimiento. Durante este 26 de septiembre, la empresa aseguró que deberá realizar algunos ajustes regulatorios, aprobaciones, trámites y el desarrollo de nueva infraestructura.
“Para el año 2025, mediante contratos ya suscritos, Ecopetrol comprometió un total de 551 Giga BTU por día (GBTUD), que representan el 65 % de la demanda nacional, sin incluir la demanda térmica. Ese año Ecopetrol requerirá alrededor de 40 GBTUD para su balance energético, cerca del 17 % de su demanda total, con el fin de asegurar el abastecimiento de combustibles al país”, indicó la compañía.
Además, agregó que para el año 2026 la empresa aportará al mercado mediante contratos suscritos, unos 370 Giga BTU por día, lo que representa actualmente el 43 % de la demanda nacional, sin incluir allí la demanda térmica.
“Ecopetrol dispone de volúmenes, por encima de esta cantidad contratada, de hasta 141 GBTUD, que serán comercializados en su totalidad, una vez el Ministerio de Minas y Energía y la Comisión de Regulación de Energía y Gas expidan las reglas que han anunciado para flexibilizar las transacciones entre agentes”, indicó la empresa.
También precisaron que durante este año la atención a la demanda, por encima de las cantidades mencionadas, requerirá de la importación a través de infraestructura ya existente. Aclararon que Ecopetrol mantendrá su evaluación permanente y en ejecución la actividad de inversiones en pozos exploratorios y desarrollos costa adentro, lo que tendría un potencial de 55 GBTUD para 2026.
¿Cuáles son las medidas que tomó la petrolera ante el complicado escenario para el gas?
Ecopetrol apunta a que es necesaria la flexibilización de la regulación, que permita eventualmente a la empresa poner a disposición del mercado la totalidad de su gas disponible para la venta en firme, en cualquier momento y mediante bloques menores a un año. Esta medida se daría como complemento a los esfuerzos ya adelantados tanto por el Ministerio de Minas como por la Creg.
La importación a través de la plataforma de SPEC LNG seguirá siendo la mejor opción de respaldo de garantía de suministro y por eso se requiere que, sobre una capacidad de 50 GBTUD de la misma, se desarrolle rápidamente la comercialidad de estos volúmenes, para que sea posible asegurar la capacidad, la firmeza y eficiencia del mercado con dicha importación. Ecopetrol celebra que se haya aprobado a SPEC LNG la expansión de 30 GBTUD adicionales para poner a disposición del mercado en 2025.
Adicional a ello, indican que también es necesario asegurar la viabilidad financiera para el desarrollo de la capacidad de transporte de gas, que permita los mayores flujos desde la Costa Caribe hasta el interior del país. “Es muy importante que el proyecto de bidireccionalidad del sistema Barranquilla-Ballena entre en operación en el primer trimestre de 2026″, agregaron.
Finalmente, indican que es fundamental acelerar la entrada de los proyectos de generación a partir de fuentes renovables, de tal forma que se de un alivio a la presión que vive actualmente el sector eléctrico y que le está imponiendo al sector de gas natural.