La economía colombiana parece tener un panorama cada vez más desalentador. Las cifras durante el último año dejaron a las finanzas nacionales muy cerca de una recesión técnica, al registrar una baja que no se había visto desde la pandemia y que preocupa a varios sectores, entre el comercio y la industria nacional.

Aunque las proyecciones del Gobierno muestran que el PIB cerraría el año en un 1,5%, los datos que ha revelado recientemente el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, demuestran que este sería un camino más difícil del que se esperaba.

Este 15 de mayo, la entidad reveló dos datos clave y con los que se mide la economía. El primero fue el dato trimestral del Producto Interno Bruto, es decir, la cifra que demuestra el consolidado de los primeros tres meses de crecimiento de la economía y de la actividad productiva del país. Este indicador revela qué tantos productos como alimentos y bienes y servicios se producen en el país en un trimestre.

El PIB creció en los primeros tres meses del año un 0,7%, lo que demuestra una baja del 2% frente a la cifra del primer trimestre del año, 2023, cuando había repuntado un 2,7%. De hecho, estas son las cifras más bajas registradas desde el primer trimestre de 2020, año en el que se desencadenó la pandemia y cuando la economía repuntó apenas un 0,5%.

La economía en Colombia depende en gran medida de las rentas petroleras. | Foto: Getty Images

Por su parte, el ISE o índice de seguimiento de la economía, que es otra cifra que revela el Dane y que analiza el comportamiento a un plazo más corto, mostró una cifra desalentadora, pues la caída en el mes de marzo fue de -1,5%.

Este dato parece haber borrado los avances que había tenido la economía en los primeros meses del año, pues en enero el crecimiento del ISE había sido de 1,4% y en febrero del 2,2%. En marzo el número se fue al terreno negativo.

Frente a la comparación trimestral con respecto al 2023, en el trimestre de enero - marzo del 2024, el ISE registró un crecimiento de 0,67%, mientras que en el mismo periodo del año anterior el crecimiento había sido de un 2,35%.

De acuerdo con lo dicho por la directora del Dane, Piedad Urdinola, en el mes de marzo la variación negativa se vio influenciada por el comportamiento decreciente de la industrias manufactureras (-5,9%), comercio al por mayor (-0,8%), actividades financieras (-3,0%), información y comunicaciones (-1,6%) y actividades profesionales (-0,2%).

Múltiples causas están generando incertidumbre regulatoria y jurídica, así como un clima enrarecido en la confianza.

Pese a ello, también hubo algunos sectores que aportaron de manera positiva a la cifra, como las actividades inmobiliarias, las de suministro de electricidad, entretenimiento, administración pública y construcción. Esta última categoría fue una de las que más sorprendió, pues el sector de la construcción ha sido uno de los más afectados durante los últimos años, tras la caída en las ventas de vivienda, que responden a una modificación en los subsidios que otorga el Gobierno Nacional en el programa ‘Mi casa ya’.

Es preciso recordar que esta semana el Dane también había revelado otro dato que borró las esperanzas de crecimiento económico en el país, pues la producción real de las industrias manufactureras bajó un 11,1% frente al mismo mes del año 2023. Por su parte, las ventas reales cayeron un 10,5% y la misma tendencia se registró para los empleos en el sector, pues el personal ocupado cayó un 1,9%.

La cifra es desalentadora pues también es similar a la registrada en medio de la pandemia por coronavirus, pues en ese momento la producción real manufacturera retrocedió poco más del 10% tras la crisis sanitaria que se desató en todo el mundo.

Gráfico cayendo frente a la bandera de Colombia. Concepto de crisis | Foto: Getty Images