Una de las principales consecuencias que ha causado la pandemia del coronavirus es la pérdida de ingresos de los hogares colombianos, pues según la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), los hogares han perdido $27,2 billones de ingresos laborales desde que llegó la covid-19 en marzo del 2020.
Esta disminución ha impedido que los hogares que aún tienen ingresos puedan ahorrar parte de estos. Según una encuesta realizada por el Dane en junio de este año, el 77,1 % de los hogares ubicados en las 23 principales ciudades del país no puede ahorrar una parte de sus entradas económicas.
La situación es más preocupante cuando el 13,8 % de los hogares dice que no tiene ingresos algunos. En contraste, el 9,1 % de los consultados afirmó que sí puede ahorrar una parte de sus ingresos.
Al mirar la situación de los hogares colombianos por ciudades, el 94 % de los consultados en Bucaramanga dijo que no podía ahorrar, mientras que solo el 1,9 % dijo que no tenía ingresos. En Santa Marta, la proporción de hogares que dijo que no podría ahorrar fue del 91,9 % y la que no tiene ingresos se ubicó en 4,9 %, mientras que en Pasto las magnitudes fueron del 86,2 % y 4,9 %, respectivamente.
La situación más delicada se presenta en Sincelejo, ciudad donde si bien solo el 51,5 % de los hogares dijo que no podía ahorrar, el 41,4 % de los encuestados dijo que no posee ingresos algunos.
También es alarmante lo que sucede en Valledupar, pues el 42,3 % de los hogares dice que no tiene ingresos, mientras que en Popayán la proporción es del 37,2 % y en Monteria del 28 %.
De acuerdo con Anif, en el peor momento la pérdida de ingresos laborales por culpa de la pandemia alcanzó a ser de $35,5 billones, en febrero de este año.
“A pesar de que se presentan mejores en comparación a los meses inmediatamente anteriores, falta camino por recorrer y se necesitan avances más pronunciados para volvernos a ubicar en niveles de antes de la emergencia sanitaria”, dijo Anif.
La pérdida de ingresos de los hogares está relacionada con el incremento del desempleo en Colombia, el cual subió el año pasado por culpa de las cuarentenas y las medidas de restricción a la movilidad que se implementaron para intentar contener el contagio del coronavirus.
Al respecto, el 34 % de los hogares colombianos consultados por el Dane cree que el empleo en el país “disminuirá mucho” en los próximos meses, mientras que el 20,4 % estima que “disminuirá poco”. En contraste, solo el 16 % cree que el empleo “aumentará poco” y el 2,9 % proyecta que “aumentará mucho”.
Esta disminución de los ingresos también afecta los planes de los hogares, como la compra de inmuebles, de bienes no durables, o el salir de vacaciones. De hecho, el sondeo reveló que en junio solo el 7,5 % de los consultados dijo que durante los próximos 12 meses alguno de los miembros del hogar podrá salir de vacaciones.
Además, el 76,2 % de los encuestados dijo que, en comparación con la situación económica de hace año, en estos momentos no tiene una mayor posibilidad para comprar ropa, zapatos o alimentos.
Sobre lo que viene a futuro, el 31,5 % de los encuestados por el Dane dijo que la situación económica durante el próximo año será peor, mientras que el 10,1 % dijo que será “mucho peor”. Por el contrario, el 23,9 % cree que será mejor y el 1,4 % respondió que será “mucho mejor”.
En lo que sí parece haber un consenso es en que la situación económica actual es peor a la de hace un año, pues el 24,4 % de los consultados dijo que hoy en día estamos “mucho peor”, y el 64,5 % dijo que la situación era “peor” que hace 12 meses.