La llegada de empresas peruanas a Colombia representa un paso significativo en la integración económica y comercial entre ambas naciones. Esta expansión empresarial puede aportar diversos beneficios, como la creación de empleos, la transferencia de conocimientos y tecnología, así como la diversificación de la oferta de productos y servicios en el mercado nacional.
Los más recientes reportes de las autoridades económicas dan cuenta de que Perú se ha convertido en uno de los mayores socios comerciales de Colombia: al tercer trimestre de 2022 la inversión extranjera directa (IED) peruana en el mercado colombiano sumó 34 mil 700 millones de dólares, lo que representó un crecimiento de 140 % frente al mismo periodo de 2021, de acuerdo con información del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
Con esto queda claro que Colombia se consolida como uno de los aliados más importantes de empresarios peruanos que buscan expandir sus negocios en el exterior y aunque la inversión peruana en el país se ha concentrado tradicionalmente en segmentos como cosméticos y agroindustria; actualmente se expande a otros nichos del mercado como servicios financieros, alimentos, construcción, logística, software, infraestructura y energías renovables.
De acuerdo con Sebastián Béndiksen, director de BéndiksenLaw Colombia, estas incursiones comerciales representan tanto oportunidades como desafíos para ambas naciones.
“Por un lado, demuestran la capacidad de las empresas peruanas para internacionalizarse y diversificar sus operaciones, lo que puede contribuir al crecimiento económico bilateral y a la generación de empleo en Colombia”, señaló el directivo de la firma de abogados.
En su opinión es fundamental que las empresas peruanas aborden esta oportunidad con un profundo respeto por las leyes y regulaciones colombianas, resaltando que el éxito de esta iniciativa dependerá en gran medida de la capacidad de estas empresas para adaptarse a las particularidades del entorno empresarial colombiano y para establecer relaciones sólidas con sus contrapartes locales.
“Desde una perspectiva legal, es crucial que las empresas peruanas se aseguren de cumplir con los requisitos fiscales, laborales, regulatorios, societarios y de inversión extranjera establecidos por las autoridades colombianas. Asimismo, es recomendable que busquen asesoramiento legal y financiero especializado para garantizar un proceso de entrada exitoso y libre de obstáculos, antes de iniciar operaciones”, consideró Sebastián Béndiksen.
No es un secreto que el crecimiento que se genera a raíz de estas alianzas y llegadas de las empresas internacionales, le abre puertas también a una mejoría en aspectos sociales y económicos de los colombianos. Es por esto que se considera como una gran oportunidad y se espera tener las puertas abiertas para los diferentes intereses.
Oportunidades y Desafíos de la Integración Comercial
Sebastián Béndiksen, agregó que el crecimiento de la inversión extranjera directa (IED) peruana en Colombia es un indicativo claro de las oportunidades que ofrece el mercado colombiano a las empresas peruanas. Este flujo de inversión no solo impulsa la economía, sino que también contribuye a la creación de empleos y a la transferencia de conocimientos y tecnología. Es un ejemplo de cómo la integración económica puede ser beneficiosa para ambas partes.
“Sin embargo, este proceso de expansión empresarial no está exento de desafíos. Colombia, al igual que cualquier otro país, tiene su propio conjunto de regulaciones y leyes que las empresas extranjeras deben respetar. Esto incluye aspectos fiscales, laborales, regulatorios, societarios y de inversión extranjera. Ignorar o no cumplir con estas regulaciones puede resultar en obstáculos y sanciones que afecten negativamente la operación de las empresas peruanas en Colombia”, dijo el experto.
Este analista sostuvo que la llegada de empresas peruanas a Colombia no solo tiene implicaciones comerciales, sino que también impacta en la sociedad y la economía colombiana de manera más amplia. Uno de los principales beneficios es la generación de empleo. A medida que las empresas peruanas establecen operaciones en Colombia, crean puestos de trabajo para la población local. Esto contribuye a la reducción de la tasa de desempleo y al mejoramiento de la calidad de vida de los colombianos.
Además resaltó que la transferencia de conocimientos y tecnología es un componente clave de esta integración económica, puesto que las empresas peruanas pueden compartir su experiencia y know-how con sus contrapartes colombianas, lo que puede elevar la competitividad de las empresas locales y esta transferencia de conocimientos puede tener un efecto multiplicador en la economía, al estimular la innovación y mejorar la eficiencia de los procesos productivos.