La economía de Estados Unidos sumó en febrero menos empleos que en enero pasado, aunque más de lo esperado por los analistas, en tanto el desempleo subió hasta 3,6 %, informó el viernes el Departamento de Trabajo.
Estos datos podrían ser los primeros signos de una desaceleración largamente esperada, en el marco de la lucha oficial contra la inflación. El mes pasado se crearon 311.000 puestos de trabajo frente a los 504.000 registrados en enero (cifra revisada a la baja).
Los analistas esperaban 205.000 nuevos empleos para el segundo mes del año. En tanto, la tasa de desempleo subió a 3,6 %, tras caer en enero a 3,4 %, su menor nivel desde 1969.
Entre el 27 de enero y el 4 de febrero, 211.000 personas se inscribieron a estos subsidios por desempleo, 21.000 más que la semana anterior y por encima de los 198.000 pedidos que esperaban los analistas, según el consenso de briefing.com. Se trata del número semanal más alto desde inicios de año.
Igualmente, “las inscripciones siguen excepcionalmente bajas con respecto a sus niveles históricos”, subrayó en una nota Michael Pearce, economista jefe de Oxford Economics. Sin embargo, es “posible que sea una primera señal”, sostuvo el analista.
Esto sigue a una serie de indicadores recientes que muestran que la contratación se mantuvo fuerte, el gasto del consumidor resiste y la inflación sigue en cotas altas. Las cifras de febrero serán publicadas el viernes, y el mercado espera un desempleo estable con 225.000 puestos de trabajo creados.
En febrero, los empleadores estadounidenses suprimieron 77.770 empleos, una cantidad menor que la de enero pero muy por encima del dato de febrero de 2022, según la consultora Challenger, Gray & Christmas, también publicado el jueves.
Se trata de la cifra de corte de puestos más alta para un mes de febrero desde 2009, cuando golpeaba de lleno la crisis hipotecaria en Estados Unidos.
“Es claro que los empleadores siguen atentos al alza de tasas prevista por la Fed (la Reserva Federal, banco central). Esperan un cambio de rumbo (de la economía, a la baja) y recortan sus gastos por todos lados”, resumió el vicepresidente de la consultora, Andrew Challenger, citado en un comunicado.
La mayor parte de los despidos se concentran en el sector tecnológico, pero también aumentan en el comercio minorista y las finanzas.
El empleo privado también está sólido
Los empresarios estadounidenses aceleraron su ritmo de contratación en febrero, según informó el miércoles la firma ADP, en un nuevo indicio de que puede ser necesario un mayor esfuerzo para enfriar la mayor economía del mundo.
El empleo en el sector privado aumentó en 242.000 puestos de trabajo en febrero, cerca del doble de la cifra de 119.000 registrada en enero y mucho más de lo que esperaban los analistas, según la ADP, compañía que gestiona el pago de salarios y publica una encuesta mensual referente sobre el empleo privado.
Esto sigue a una serie de indicadores recientes que muestran que la contratación se mantuvo fuerte, el gasto del consumidor resiste y la inflación sigue en cotas altas, a pesar de los esfuerzos de la Reserva Federal (Fed, banco central) para controlar los aumentos de precios.
“Estamos viendo una contratación sólida, lo que es bueno para la economía y los trabajadores, pero el crecimiento salarial sigue siendo bastante elevado”, dijo Nela Richardson, economista jefe de ADP, en un comunicado en el que también alertó que “es poco probable que la modesta desaceleración en los aumentos salariales, por sí sola, reduzca rápidamente la inflación en el corto plazo”.
En febrero, el crecimiento salarial se desaceleró y bajó al 7,2 % en comparación con el año anterior. Para los trabajadores que cambiaron de empleo, el aumento de ingresos también disminuyó, en este caso al 14,3 %.
*Con información de AFP.