En medio de la campaña electoral que vive el país, los candidatos a la Presidencia atienden constantemente a foros y debates sobre los temas de actualidad más relevantes, no solo para Colombia, sino del mundo.

En un conversatorio realizado en el marco del Congreso Nacional de Infraestructura, el candidato Gustavo Petro volvió a generar polémica al divulgar información que no es verdadera sobre el actuar de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) en medio de la pandemia.

“Yo sí creo que en tiempos de crisis hay que hacer lo de la Fed de Estados Unidos. La banca central de EE. UU. emitió, tal cual como lo hizo el Banco de la República, pero en lugar de dirigir esos recursos a las grandes empresas y a la utilidad bancaria, lo entregó a todo el empresariado de Estados Unidos y a los hogares, a los que les llegaban los cheques a su casa”, dijo Petro durante su intervención.

Las declaraciones del candidato, como era de esperarse, generaron polémica y malestar en expertos económicos, quienes salieron a desmentir a Petro, pues la Fed sí emitió dinero, pero en ningún momento fue para darle esos recursos de manera directa a los hogares afectados por la pandemia.

“¿La Fed emitió dinero para entregárselo a los hogares que les llegaban cheques a su casa? ¡Falso! Los programas de emergencia de la Fed otorgaron liquidez al sector financiero para apoyar su funcionamiento y el flujo de crédito a empresas y hogares”, explicó el estratega jefe para América Latina de la firma XP Investments, Andrés Pardo.

Y es que el mecanismo empleado por la Fed al momento de emitir dinero fue muy similar a lo hecho por el Banco de la República en Colombia: con la emisión compran deudas, títulos o bonos de los bancos privados para que estos tengan liquidez (efectivo) y puedan prestar más a las empresas y a la ciudadanía en general.

A este tipo de iniciativas se les conoce como programas de expansión cuantitativa, por medio de los cuales se aumenta la liquidez que hay en el mercado, pero no se incurre en riesgos de devaluación e inflación que traería consigo una emisión descontrolada, pues a final de cuentas los bancos deberán pagar al Emisor los recursos solicitados.

Sobre los cheques que efectivamente el Gobierno de Estados Unidos hizo llegar a los hogares afectados por la pandemia, no es cierto que los recursos de estos hayan salido directamente de la emisión de dólares por parte de la Fed, sino que esta iniciativa fue financiada por medidas fiscales como el incremento de la deuda.

Petro volvió a insistir en que el Banco de la República emitió más de $30 billones el año pasado y que gran parte de esos recursos fueron a parar en las utilidades de los bancos privados de Colombia.

“El Banco de la República emitió el año pasado $37 billones que se destinaron como liquidez a la banca privada. Allá llegaron $17 billones y automáticamente declararon repartición de dividendos, es decir, repartieron $13 billones. En medio de la pandemia, el Banco de la República transfirió de una emisión de dinero directamente $13 billones a utilidades de los bancos”, dijo Petro.

Esta declaración también escapa a la verdad, pues el Banco de la República no emitió dinero para darles utilidades a los bancos, como dice el candidato, sino que por medio de la emisión obtuvo títulos de deuda y activos. Estos títulos y activos garantizan que el banco recupere sus recursos provenientes de la emisión.

Y es que Petro ha insistido en que el Banco de la República debe emitir para financiar distintas iniciativas de gasto público como, por ejemplo, una renta básica universal. A esta propuesta, el gerente general del Emisor, Leonardo Villar, se ha mostrado en contra en repetidas ocasiones, pues advierte que puede tener un impacto muy negativo en la economía.

“Algunas personas creen que el banco puede hacer magia, que puede imprimir billetes y solucionar todo. Hacer eso puede provocar que perdamos esa credibilidad y esa confianza que nos ha permitido actuar en forma tan constructiva y contracíclica”, dijo Villar meses atrás.

Y añadió que el problema de la economía colombiana no es la falta de liquidez, sino las dificultades en materia de productividad.

“Imprimiendo billetes no se salva la economía. El problema es la producción de la actividad económica, eso es lo que necesita ser estimulado y para eso se necesita confianza de los agentes económicos”, dijo.