SEMANA conoció decenas de documentos, que reposan en un link de acceso libre, donde quedan claras las actuaciones del presidente del Grupo Sura, Gonzalo Pérez; Ricardo Jaramillo, CFO del conglomerado financiero, y Juan Luis Múnera, cabeza legal del grupo.

Allí se evidencia cómo emprendieron sistemáticamente, desde que se conocieron las OPA, una campaña contra las autoridades regulatorias colombianas, incluyendo la Superintendencia Financiera, la Superintendencia de Salud y la Superintendencia de Industria y Comercio.

Esta estrategia fue puesta en marcha a través de abogados, y decenas de funcionarios sienten que son amenazas y medidas intimidatorias. Algunos de ellos hablaron con SEMANA, bajo la reserva de su identidad por temor a represalias.

Mientras Gonzalo Pérez dice públicamente que es una persona ética y les ha dado la bienvenida a todos los accionistas, reconociendo las leyes del mercado, él y su equipo de la alta gerencia, junto con abogados, de forma soterrada, han hecho todo lo contrario.

Causa curiosidad que, al tiempo que han emprendido estas presiones contra las autoridades, se han valido de periodistas y medios para tratar de difundir sus argumentos.

Como nada de esto les ha servido, ahora, en el desespero, los administradores del Grupo Sura, con el dinero de sus accionistas, instauraron recursos legales con el fin de tumbar el acto administrativo que les otorgó las acciones a Gilinski, el mayor accionista.

Hay cartas, derechos de petición y documentos formulados por abogados como Ramiro Bejarano Guzmán, Jaime Elías Robledo Vásquez (socio de Brigard y Urrutia) y Juan Carlos Esguerra Portocarrero.

Expertos consideran que se trata de maniobras jurídicas con el fin de intimidar a las autoridades regulatorias que, en el cumplimiento de la ley, le han dado vía libre a una operación financiera que los propios miembros del GEA han dicho que están enmarcadas en las leyes del mercado.

Esta es una señal de desespero ante haber incumplido sus promesas de traer OPA concurrentes y competitivas cercanas al valor fundamental de Nutresa, donde todos los accionistas se pudieran beneficiar, y socios estratégicos para Sura.

Así mismo, hay que recordar que durante una década destruyeron el valor de todos los accionistas de Sura y se pagaron sueldos y lujos exorbitantes, tal como lo denunció el propio exvicepresidente Germán Vargas Lleras, en su columna en El Tiempo.

A eso se le suma el miedo que tenían de que se descubrieran irregularidades, como los detalles ocultos en sus estados financieros, como lo advirtió Ernst & Yong, así como el derroche y los privilegios de los administradores y proveedores.

Hoy, las compañías del denominado GEA son objeto de investigación en la Superintendencia de Sociedades y la Superintendencia Financiera por actuación de control conjunto, es decir, por haber actuado presuntamente como grupo, pese a que la ley lo prohíbe.

Según la demanda instaurada por Gonzalo Pérez contra las autoridades regulatorias, en nombre del Grupo Sura, hay más de 100 documentos que la soportan. Todos ellos están en un link que, de acuerdo con la misma demanda, tienen un acceso libre de restricciones. Dichos documentos se pueden consultar en la página 37 de esta demanda:

* Gabriel Gilinski es accionista de Publicaciones SEMANA.