El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, se mostró optimista frente al próximo dato que sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC) dé a conocer el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane), correspondiente a este mes de marzo y que se revelará a principios del próximo mes.
Luego de un encuentro con empresarios en la ciudad de Barranquilla, el alto funcionario del Gobierno Petro manifestó que para el tercer mes del año se va a hacer más evidente la disminución de la inflación, respecto a las variaciones de enero y febrero, que se situaron en 1.78 % y 1.66 %.
Aunque no dio a conocer su cifra en concreto, Ocampo afirmó que “en este mes de marzo va a bajar la inflación. Esa es mi apuesta y de hecho, en alimentos, la inflación lleva dos meses a la baja y uno de los efectos positivos que ha tenido es que la inflación para hogares pobres, de bajos ingresos, ya lleva también dos meses de reducción”.
Indicó además que si bien los niveles de inflación siguen siendo altos, confía que ésta cederá a partir de marzo y que esto tendrá “efectos positivos en dos sentidos diferentes: primero, van a aumentar los salarios reales, que han venido, salvo con la inflación del año pasado, en un incremento del 16 %; y en segundo lugar, va a permitir que el Banco de la República baje las tasas de interés, posiblemente, en el segundo semestre del año”.
El ministro también se refirió al comportamiento de la economía nacional, con relación a la desaceleración que viene registrando y donde las proyecciones de los expertos apuntan que el Producto Interno Bruto (PIB) crecerá por debajo del 2 %. Al respecto, expresó que las medidas de política económica que se han venido adoptando por parte del Gobierno nacional, prevén que los efectos del menor ritmo de crecimiento no impacten el desempeño de la economía.
“Hay mucha decisión todavía sobre datos. El comienzo de año va a seguir teniendo efectos de desaceleración, pero yo tengo la esperanza de que avancemos, en primer lugar, en los tres grandes objetivos de este año, que son: reducir la inflación, reducir el déficit fiscal y reducir el déficit en cuenta corriente en la balanza de pago”, apuntó.
Y sobre qué tan fuerte será la desaceleración, manifestó que tiene “un relativo optimismo” y que esto se debe a que hay muchos factores favorables entre los que mencionó las tasas de interés de los TES de deuda pública, las condiciones climatológicas que impactarán positivamente sobre la producción agrícola frente a lo que fue el año pasado; al igual que el aumento que vienen registrando las exportaciones no tradicionales, el comercio con Venezuela, y algunas medidas que se están implementando en relación con el gasto público.
Asimismo, Ocampo se mostró optimista frente al tema tras conocer las observaciones que realizó el Fondo Monetario Internacional (FMI), que destacó las medidas macroeconómicas que se han venido adoptando en el país para enfrentar la inflación, y contribuir a su vez a que la economía se siga dinamizando y que continúe esa senda en los años siguientes.
“El informe que hizo público el Fondo Monetario Internacional, en lo relacionado al artículo IV, es muy positivo. Es un apoyo a la política económica del Gobierno y del Banco de la República”, afirmó el ministro.
La apuesta de Ocampo frente a la inflación va en sintonía con lo que han expresado varios expertos consultados por SEMANA que consideran que a partir de marzo se empezará a observar una caída, ya que los precios de los alimentos -que es lo que más ha incidido en el incremento- evidenciarán disminuciones que se traducirán en un menor impacto sobre el bolsillo de los colombianos. Sin embargo, la tendencia más notoria será en el segundo semestre, donde las estimaciones se inclinan a que la inflación comenzará a corregir su variación, llevando a que cierre el 2023 en un dígito.