En los últimos días el precio del dólar en Colombia se ha disparado de tal manera que ha llegado a cotizarse a valores nunca antes vistos en el país. Expertos afirman que es posible que la moneda llegue a los 5.000 pesos antes de finalizar el año o a comienzos de 2023.
En estos momentos el dólar se cotiza 4.912 pesos en Colombia, pero durante la mañana de este viernes ha alcanzado, incluso, un precio de 4.958 pesos con 90 centavos. Frente al cierre del pasado jueves 20 de octubre (4.904 pesos) está subiendo unos ocho pesos; para este fin de semana y el próximo lunes podría regir una TRM de 4.900 pesos, por primera vez en la historia.
El dólar sube por cómo se comporta la oferta, la demanda y la Tasa Representativa del Mercado (TRM), que es la cantidad de pesos colombianos por un dólar de Estados Unidos. Hay que tener en cuenta que en momentos está aumentando la demanda de dólares, especialmente, por las compras y viajes al exterior que se dan en el último trimestre del año.
Sin embargo, aunque el comportamiento de la divisa estadounidense no se relaciona directamente con las decisiones políticas del país, indirectamente sí han afectado las declaraciones y posibles políticas que pueda tomar el gobierno del presidente Gustavo Petro.
Cuando Gustavo Petro fue elegido presidente de Colombia, el dólar estaba a 3.900 pesos y desde esa fecha hasta el día de hoy se ha devaluado casi 20 %. Solo el 12 % de esta cifra es por efectos de la devaluación e inflación mundial. En cuatro meses la moneda ha subido unos 1.000 pesos.
De acuerdo con un análisis de Maryury Alzate, docente de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano, entre los factores nacionales que más han causado la disparada del dólar se destaca la incertidumbre para la inversión frente a la reforma tributaria que se está discutiendo actualmente en el Congreso de la República.
“Si bien los anuncios del presidente no son el factor más importante, sí influye por la falta de consistencia entre lo que se anuncia Presidencia y lo que dice el ministro de Hacienda (José Antonio Ocampo)”, aseguró la experta. Pues en varias oportunidades el ministro Ocampo ha tenido que salir a desmentir o corregir afirmaciones tanto del presidente como de otros ministros.
“El mercado está resistiendo fuertemente todo aquello que ponga en tela de juicio la capacidad de los gobiernos de ahorrar para su deuda externa futura y aquí interviene la reforma tributaria que está a la vista y el gobierno saliente que dejó el país endeudado. Todo esto suma para que haya un tema de riesgo en invertir en Colombia”, agregó.
Pero esta no es la única razón. Entre los factores externos que afectan el dólar está la expectativa de mayores incrementos de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal, la salida de portafolios extranjeros en Colombia hacia Estados Unidos o hacia otros refugios inversionistas de capital, el recrudecimiento de la guerra en Ucrania y el papel de Estados Unidos en ella y los anuncios fiscales en el Reino Unido.
“Internacionalmente, el aumento de las tasas de interés en Estados Unidos busca atraer inversiones que deben hacerse en dólares, por lo que en el resto del mundo se hacen escasos, generando mayor devaluación”, comentó el docente del Politécnico Grancolombiano, Martín Eliecer Cárdenas.
¿Quiénes se benefician con un dólar caro?
Un dólar a 4.900 pesos es una buena noticia para los exportadores de bienes y servicios, porque son quienes reciben pagos en dólares. “Aunque se benefician los exportadores, hay que tener en cuenta que algunos costos los tienen en dólares, por ejemplo, los fertilizantes, así que no todo se traduce en ganancias”, aseguró Martín Eliecer Cárdenas.
Sin embargo, un dólar caro también perjudica a los importadores, especialmente, si sus mercancías se pueden sustituir por producción nacional. Y los más grandemente afectados son los que tienen deudas con el exterior, empezando por la deuda externa de Colombia.
¿Cómo impacta la economía y la canasta familiar?
El dólar alto transfiere inflación, lo que afecta negativamente la oferta y genera un aumento del desempleo, poniendo al país en riesgo de estanflación. Esto va a obligar a las autoridades económicas a utilizar herramientas de política expansivas, pero de manera muy coordinada entre el Gobierno y el Banco de la República. Además, se van a desacelerar las importaciones.
En cuanto a la canasta familiar, la disparada del dólar impacta al alza los precios de algunos alimentos que dependen de insumos importados. También costarán más los productos que se traen de Estados Unidos, como electrodomésticos, celulares o prendas de vestir.